𝘗𝘭𝘢𝘯 𝘥𝘦 𝘤𝘰𝘯𝘲𝘶𝘪𝘴𝘵𝘢; 𝖡𝗂𝗅𝗅 𝖪𝖺𝗎𝗅𝗂𝗍𝗓.

06

↣Kiara Evans↢

Morgan no dejaba de hablar de lo buena que iba a estar la fiesta de esta noche, las confiables fuentes dicen que es para celebrar el cumpleaños de los gemelos. Y así será, no es una fiesta sorpresa, porque ambos odian las sorpresas, son como dos ogros cuando se trata de esas cosas y no queríamos malentendidos, así que nos ahorramos el mal momento y les dijimos específicamente que el viernes 1 de septiembre, seria la gran fiesta de celebración por el gemecumpleaños.

Inhale y exhale, calmando mis ganas de ponerle una cinta en la boca a mi hermana menor.— Morgan...—murmuré dejando la taza de café a un lado. Ella estaba en mi apartamento, quería que la ayudara a elegir algún vestido para la fiesta.

— Es que ¿Te das una idea de la cantidad de gente que asistirá? Debo estar presentable, Tom me verá y...—me perdí en la conversación cuando nombro a el pelinegro de trenzas. Tom la vería a ella, es cierto, siento que el gran avance que estábamos teniendo con el Kaulitz mayor, iba en bajada, muy rápido. Realmente puedo sentir como es que Morgan se esta esforzando por tener algo con Tom, creí que solo era un poco de atracción física, nada más, pero ahora escuchando las palabras de la morena y el sentimiento con el que habla sobre él, me esta haciendo dar cuenta que mi hermana...tiene quiere algo más que solo "follar".— Kiara ¿Estás escuchando lo que te digo? —no, estaba ocupada pensando en que también creí que sentía algo por Bill.

— No, lo siento...—bajé mi cabeza dejando mi mirada fija en el suelo.

— Te decía que a Tom le gusta como queda el color rojo en–

Gracias, la campana me salvó, ya no podía aguantar más a mi hermana hablando del hombre del que estoy enamorada, mi teléfono sonaba tan repetidamente que parecía una urgencia. Miré a Morgan con una media sonrisa, dándole a entender que era necesario contestar aquella llamada. A penas asome mi cabeza a ver de quien se trataba, sonreí abiertamente, Bill estaba llamando.

— Hola mi amor.—dije en un tono dulce y animado al teléfono recibiendo una mirada de mi hermana, ella sabía muy bien con quien hablaba, por lo que note como se acercaba ligeramente a mi, para escuchar.

Una risa nasal se oyó desde la otra línea.— Ki, cielo ¿Estás ocupada? —preguntó Bill, mientras se escuchaba como cerraba una puerta, seguramente la de su auto. Abrí mi boca para contestar, pero el pelinegro se me adelantó.— No me importa, abre la puerta, estoy subiendo a tu apartamento —.

Sonreí de oreja a oreja al ver como Morgan comenzaba a peinarse el cabello, tomaba un pequeño espejo que tenía en su bolsillo mientras retocaba su maquillaje y revisaba si su ropa estaba presentable. No entiendo, pero si puedo darme cuenta, que esta flechada por uno de los Kaulitz, la es cosa es saber cual.

— Bien...—murmuré mientras caminaba a la puerta, podía sentir los pasos de Morgan detrás de mi.

— Oh, y...espero que no te moleste, pero Tom viene conmigo —.

No me molesta...pero no quiero ver a Morgan pegada como una garrapata a Tom, me hace doler el estómago y siento ganas de llorar, porque me gustaría ser yo la que este cerca de él, me gustaría ser yo a la que le regala esas sonrisas coquetas tan atractivas, me gustaría ser yo la que se sienta en su regazo cuando están en algún descanso. Pero a la mierda, porque todo lo que hace Morgan con Tom, voy a hacerlo a partir de ahora con Bill. Ahí voy a ver con quien realmente quiere estar.

— Tranquilo, Morgan también esta aquí.—fue suficiente para que mi hermana corriera a la puerta antes que yo, para recibir a los chicos.

Debía ver eso, necesitaba ver como iba a recibir a los gemelos.