•10 años más tarde•
Freen
Las palabras del director eran incomprensibles para mí, tal vez era porque no había dormido lo suficiente la última semana pero tenía la sensación de que algo extraño iba a suceder.
Abril no era de mis meses favoritos, a pesar de que la hermosa primavera se acercaba. Muchas cosas habían sucedido pero recordar todo aquello no era de mi preferencia, no ahora.
— Ella será la protagonista, Looknam, Nam Orntara — los aplausos no tardaron mucho y levanté la mirada para ver de quién se trataba.
— Esperó nos llevemos bien
Diablos.
Es demasiado bonita. El cabello rubio era lo que más resaltaba en la extranjera que tenía enfrente y se veía tan delgada que creo poder romperla con sólo mi mirada.
He estado trabajando en este teatro los últimos tres años, tuve algunos pequeños papeles pero casi siempre trabajo en utilería; he visto a muchos actores pasar, muchas obras y escenarios diferentes.
Pero desde que tuve el guión de esta obra, sentí que mi estómago iba a devolver toda mi comida; por lo que había entendido, el director no había escrito la obra si no que era de un conocido suyo.
Yo esperaba preparar escenario para el lago de los cines, tener lindos vestidos de bailarinas y disfrutar de algunos ensayos. Pero no era así, era como un balde de agua fría cada que leía el guión.
El director anunció nuestro descanso de quince minutos, salí casi corriendo hacia la puerta trasera, sentía que mis manos temblaban, definitivamente no era mi día. Saqué de mi bolsillo una cajetilla de cigarros, hábito que tomé de la universidad a la que fui años atrás.
Estaba sobre pensando las cosas, de eso estaba casi segura, pero no es como si pudiera hacer mucho. Sin darme cuenta, la rubia bonita estaba a mi lado.
— Am... lo siento ¿quieres que lo apague? — Aleje el cigarrillo con la intención de apagarlo.
— No, está bien... mi pareja tiene la misma manía así que estoy acostumbrada
Después de eso el silencio dominó todo el lugar, no sabía qué decir pero la rubia no dejaba de mirarme y eso me estaba haciendo sentir incómoda.
— ¿Necesitas algo? — Pregunté y apagué el cigarro, mire de nuevo a la rubia, tenía una sonrisa que me da algo de miedo.
— Quiero que seamos amigas, eres la única que no me ha hablado... ¿Hay alguna razón?
— No acostumbro a hablar con las protagonistas, lo siento
Antes de que ella pudiera decirme algo mi celular sonó, evite decir alguna maldición al ver el nombre de quien me llamaba.
— Hola mamá
— ¿Vendrás a la cena del padre Lee o faltarás de nuevo? — La dura voz de mi progenitora fue todo lo que pude entender, ni siquiera sé cómo es que sigo en comunicación con ella luego de que yo me mudé con la señora Mind.
— Puede que trabajé horas extra y no es como que me lleve bien con el padre Lee
— Estás pecando de nuevo, ¿no es así? — voltee los ojos al escuchar aquello— Freen Sarocha ni te atrevas a estar saliendo con una mujer de nuevo.
— Te llamaré luego mamá, estoy ocupada
Corte antes de que mi madre pudiera decir algo más, seguía restregandome en la cara que estaba mal salir con una mujer pero no es como si ella estuviera tan pendiente de mi vida personal.
— ¿Estás en problemas?
La voz de la rubia me sacó de mis pensamientos, al verla mi cerebro se iluminó, tal vez solo tal vez podría cambiar la forma de ver las cosas a mi madre al menos una sola vez para que dejará de molestarme.
— Quiero que me ayudes en algo
Porque definitivamente, Nam, era físicamente lo que más odiaba mi madre además de a mi.
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A I'antenne || Freenbecky
Casuale❝No hay nada de malo en acostarse con alguien de su propio sexo.❞ Una persona le dió la vuelta a la forma de pensar de Freen Sarocha pero estaba segura de que se hundiría en el infierno si continuaba. --- Esta historia no es mia, es solo una adaptac...