Contrato de Amor-KOOKTAE [Adaptación]

Capítulo 38.

Pov Jungkook.

“Jungkook, el desayuno está listo". Nana como siempre tan linda se encargó de venir a despertarme, esto pasa siempre que me quedo dormido.

Abro los ojos perezosamente y veo el reloj, son las nueve de la mañana, muy temprano para mi pero tarde para el trabajo me levanto de la cama y comienzo a prepararme.

Ya listo y guapo como siempre, me dirijo al comedor para tomar mi preciado desayuno, al entrar lo veo totalmente vacío, ¿Taehyung seguirá dormido?. Nana sale de la cocina apurada.

—Nana, ¿y Tae?—Le pregunto antes de que me deje solo en el comedor.

—En la cocina, está terminando de decorar el pastel que hizo esta mañana.—Hago un asentimiento y me dirijo a la cocina.

La escena que me encuentro es digna de fotografía, Taehyung está decorando el pastel con mucha concentración, tanta que para hacer más  precisas las líneas de chocolate saca la lengua y frunce el ceño es tan adorable y lindo.

Pone unas fresas sobre el pastel como último detalle y al fin  se percata de mí presencia, me mira y enseguida desvía la mirada poniéndose rojo hasta las orejas pero no sé porqué mi respuesta llega de inmediato, el recuerdo del beso.

¡Diablos, lo besé yo, carajo!.

—Bue-buenos días.— Balbucea bajito, bien Jungkook, actúa normal.

—Buenos días, ayer no me dijiste como te fue ayer con los regalos.

—Oh, casi lo olvido… pues sólo compré uno, espero que no te moleste.—Comenzó a limpiar sus manos en un paño nerviosamente.

—Te dije que compraras dos.

—Sí pero ví un reloj muy bonito y quiero dárselo por parte de los dos, me das la mitad del costo y ya está.— Su sonrojo se fue, abriendo pasó a su bella sonrisa, no me queda de otra más que aceptar, no podría decirle que no.

—Está bien.—Sus ojitos brillaron un poco y guardó el pastel en el refrigerador.

A los pocos minutos llegó Nana, para servirnos nuestro desayuno, el mismo que terminamos comiendo en la barra de la cocina junto con Nana.

—Por cierto… casi lo olvido, Jackson le va a regalar una cena a mi papá…yo, bueno… ¿Quieres venir?— Juega con sus dedos sobre la mesa, un gesto adorable a mi parecer.

—Claro, ¿A qué hora?—. Limpio mi boca y sonrío cuando veo su expresión de emoción.

—A las ocho.

—De acuerdo, en cuanto salga de la oficina vengo por ti y nos vamos  juntos.— Asintió varias veces sacándome otra sonrisa.

Al terminar el desayuno Taehyung se fue a su habitación y yo preparé mi maletín para salir de casa, voy conduciendo, estoy a nada de llegar a la oficina las bocinas de mí auto suenan con mi tono de llamada y presiono el botón verde para responder.

Llamada entrante:

—Si, ¿diga?

—¿Quieres saber quién soy?—Una voz gruesa pregunta dejándome completamente confuso.

—¿Quién eres y porqué tienes mi número?—Respondo molesto, no tengo tiempo para juegos tontos.

—Sólo espera un poco más, pronto sabrás quien soy, por lo pronto revisa el sobre que acabo de dejar en tu oficina, es una pista importante.

—!¿Quién carajos eres?!— Grité con frustración golpeando el volante.

De repente la llamada se cortó, llamo de vuelta y ni una sola vez entra la llamada, aceleró con la intención de llegar en menos de un minuto a la oficina y revisar el maldito sobre.