Aetérnum

Capítulo 31

"Wakmanta"

Maratón2/2

Madison.

¿Era muy pronto para esa decisión?¿Era lo correcto?

Mi mente no dejaba de maquinar día y noche desde que Damon me propuso irme con él. Mi primer sueño era abandonar esta isla, claro está. Pero ¿Era el momento?

Resoplé frustrada y tomé el teléfono.

Luego de tres timbres atendió la video llamada.

—Abuela.—saludé y me sonrió.

Estaba en una especie de parque.

—¿Cómo está mi nieta favorita?

—Confundida.

—Habla con tu abuela.

Le conté un poco avergonzada y su sonrisa creció.

—Ya tienes 17 años Madison, tienes la oportunidad de un futuro mejor, al lado de una persona que te ama. Todos en algún momento debemos abandonar el nido y emprender nuestro propio vuelo.¡Se fuerte! Eres una guerrera y yo voy a estar aquí esperándote con los brazos abiertos.

Elevé mis comisuras.

—Pero...mi madre y mis hermanos.

—Tu madre...ella escogió su destino. Tus hermanos estarán bien porque pienso volver a la isla una vez te deje bien instalada aquí.

Asentí más tranquila.

—Gracias abuela.

—No me agradezcas, mejor ve y compra esa maleta, aquí te espero con chupa chupas de mango y mucho helado de chocolate.

—Odio el chocolate.—con una mueca arrugo mi nariz.

—Niña loca¿Quién dijo que era para ti?

Comencé a reírme con fuertes carcajadas. Damon asomó la cabeza alarmado.

—Te quiero mi vida.

—Te quiero mami.

Cortamos la videollamada y mi novio pasa sonriente.

Besa mi sien y se sienta a mi lado.

—Le contaste.

—Sí, está mas que contenta por recibirnos.

—Y yo por conocerla.

Sus mejillas estaban levemente sonrojadas por la frialdad. Llevaba un abrigo fino de color negro al igual que su pijama de algodón.

Habíamos tomado una siesta.

—Ya mi mamá está al tanto. Alegó que en unos meses iba para vivir cerca de nosotros pero necesita un tiempo en lo que renuncia a su trabajo.No es tan sencillo.

—Entiendo. ¿Cuándo es el vuelo?—pasé mis manos por su cuello y enrosqué mis pies en su cintura quedando sentada prácticamente arriba de él.

—En dos semanas. Tenemos que comparar unas cosas y dejar listas otras. Ya pedí la baja, Ulises no tuvo lío con eso. También me dio tu baja de la prepa para que puedas continuar tus estudios allá.

—Terminaré el último año en línea porque quiero enfocarme en abrir un negocio.

Me mostró su perfecta dentadura.

—Estoy muy emocionado.—confesó.

—Yo mucho más, quiero vivir de una vez por todas. Cumplir mis sueños y metas.