En esta vida, seré una buena hija, Mamá.

Capitulo 12 "Psicologa."

Nota de Victoria Adrial: Holis! Espero contar con su apoyo y puedan recomendar mis libros. Tengo varios videos en TikTok  que tengo de los personajes; @victoriaadrial2

—¿Cecilia?—La llamada de su esposo la hizo reaccionar—Estás ida.

Ella miró a su esposo y solo negó.

—No es nada, Roderick.

—Los Doctores dijeron que estaría bien. Tranquila.

Era más que eso. Su hija sentía mucho miedo de ella. No sabía que había hecho lo tan mal cuando cumplió todos los deseos de su hija a lo largo de estos años. Era una mujer profesional y que se ha encargado de que Lottie no tenga la presión de la sociedad.

¿Ahora es una mala madre?

La sombra de la duda se cernía sobre ella, una figura que siempre parecía inmutable, pero ahora, bajo la luz cruda de la realidad, su imagen se desdibujaba. La crueldad en sus ojos, la frialdad en su voz, todo parecía conspirar en su contra, incluso ante la mirada inocente de su propia hija.

—Lo hablé con tu madre —Habló Cecilia, su voz llena de recelo, como si cada palabra fuera un peso que no podía soportar—. Pensamos que lo mejor es que Charlotte asista con un profesional para ver qué tiene.

—Mi hija no está loca —murmuró entre dientes, la ira y defensa mezcladas en un grito silencioso—. Ha cambiado para bien, aunque no sea una copia de ti como te gustaría. ¡Que ya no quiera ser una malcriada y caprichosa no significa que...!

Cecilia lo abofeteó con una fuerza que parecía brotar de lo más profundo de su ser, como si cada golpe fuera una liberación de años de resentimiento.

—Primero: No creo que mi hija esté loca —su voz era un cuchillo afilado, cortando el aire con precisión—. Segundo: Su cambio no es lo malo; solo hay cosas que dice que me demuestran que no está bien. —Fue clara y específica, cada palabra una acusación—. Tercero: Charlotte tiene el poder y el dinero para ser la niña más caprichosa y malcriada del mundo si le da la gana.

Roderick apretó las orillas de la mesa de su despacho, inclinado como si el peso del mundo estuviera sobre sus hombros. Su mirada era un lago de tristeza, reflejando la profundidad de su dolor.

—Ella se parece a mí también —aseguró, su voz llena de emoción—. Todos estos años hice lo que me dijiste y al ver crecer a nuestra hija solo la veía como una versión de ti. Desde que cayó, ese golpe me hizo ver que detrás de esa niña altiva y mimada existe una niña frágil, dulce y muy curiosa. Lottie es la razón por la que no nos hemos derrumbado, Cecilia.

—No me digas que ahora te duele —Cecilia se burló, su tono venenoso—. Eres patético. Si de verdad te importa, entonces explícame cuál es la razón de por qué mi hija... —No, Cecilia lo pensó mejor. Si le decía que los pensamientos y dudas que poseía Charlotte pueden que llegaran a solucionarse, eso era algo que ella no esperaba. En realidad, deseaba todo lo contrario; no quería perder a su hija. Si tenía que sacrificar la relación de Roderick con Charlotte, eso haría.

—¿Qué no me estás diciendo? —Roderick necesitaba saber qué sucedía con su hija, su voz llena de desesperación.

Bajó su mirada, como si el peso de sus propias palabras fuera demasiado para soportar—. Debido a que este tipo de atención que estás dedicando a Charlotte, más que antes, no lo hacías cuando ella era una niña, siente que solo lo haces por compromiso y no porque realmente te nace. La he visto triste y en sus sueños te menciona, pero como algo distante, como queriendo esforzarse pero no logra que la ames. "Papi quiere a Lottie" Eso es realmente triste.