Nueve

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Jungkook era un tipo decidido, el cual una vez se planteaba algo lo cumplía por que tenía palabra, así fuera la cosa más insignificante del mundo él  la cumpliría por boca abierta y orgullo.

No le gustaba la violencia, era mejor pasar de desapercibido y invisible, ir por tu camino sin que nadie te mire por que ser el centro de atención no era lo suyo, prefería estar en su mundo por que eso era lo que sus padres le habían enseñado. Así el mundo este patas arriba tu solo sigue con tu cometido por que los demás no te notarán.

Aquí era donde estábamos, donde le habían dañado la alegría que su novio desprendía, y por ser la de el también era la suya, lo sentía así, se habían metido con la persona equivocada y es que tan solo desde ese día donde había llegado con su labio lastimado juro dejar su marca a los responsables.

Por eso era que estaba justo con los tipos que habían jodido su felicidad, su parte racional estable y al amor de su vida por muy cursi que sonara.
Estaban los siete justo frente a un edificio abandonado, donde estos solían ir a tomar y perder el tiempo en los siguientes días pasantes, pero que ahora tendria otras funciones.

Todos entraron y cerraron como era costumbre, subiendo por las escaleras hasta el último piso donde dejaron la bebida en el piso y así tirarse en el sofá riendo como los locos que se creían, por que no conocían a un verdadero loco, no aún.

Jeon fue el primero en tomar una de las cervezas y abriría, inclinando está a sus labios sin realmente tomar del contenido, sintiendo como se le era arrebatada y era tomada por el jefe del combo ese.

__ Tardas mucho en tomarla hombre __le apunto con el dedo, tomando la bebida de una sola y agarrando otra__ Me pregunto en donde las compras, son muy buenas.

__ En la esquina hay una nueva licorera, las compré de ahí a ver qué tal estaban __se encogió de hombros.

__ Pues buena elección,por que están buenas, muy buenas __rio palmeando el hombro ajeno.

Todos fueron y buscaron sus respectivos tragos, encontrando en la bolsa de todo un poco, y así comenzando a contar chistes tan bajos y patéticos como Ellos.

Luego de unos pocos minutos uno de estos miro al pelirojo, para así sentarse a su lado y suspirar.__ ¿No vas a tomar?, Esto creo que me llevo a mi viaje astral sin fumarme nada.

Jeon lo observó en silencio, los observó a todos y como estaban, riendo solos y cantando cosas extrañas, tomando trago tras trago sin pasar saliva y solo de una, perdidos en su burbuja ajenos a lo que pasaba en su alrededor, genial.

Espero, solo espero un rato más donde al hacerlo y ver cómo estos caían rendidos en cualquier parte del espacioso lugar se levantó de dónde estaba caminando a la esquina y sacando de esta bolsas negras, guantes y tras cosas necesarias para más tarde.

Miro como el último de estos se golpeaba con el mismo cuerpo de su amigo en el piso y caía junto a este boca arriba, sintiendo asco al verlos como cucarachas en Alcantarillas, Amontonadas y listas para la fumigación.

__ Lo que hacemos es ilegal, nos pueden meter mínimo treinta años por esto __dijo una voz gruesa mientras entraba al lugar con un bolso colgando en su hombro derecho, una voz conocida.

__ Ilegal lo que ellos hicieron, ¿Cerraste bien afuera? __pregunto mientras de otro cuarto sacaba cosas.

__ Lo hice, también te traje lo que me pediste y lo que creía que fuera necesario sin tomar muchas sospechas para esto.

Jeon asintió, mirando por un momento a los tipos y luego a su amigo. __ Como... ¿Como está él?.

SeokJin suspiro, entendiendo a la perfección que era lo que el otro decía, y es que desde hace días solo miraba a su pareja cuando dormía, no dejaba que se acercara y mucho menos le hablara a menos de tres metros, era jodido todo lo que pasaba.

__ Bien dentro de lo que cabe, hoy no comió mucho ya que apenas entro el bocado salió, devolvió todo en menos de tres horas __le dijo, dejando las cosas aún lado__ Puede ser indigestión o quizás algo le cayó mal, solo se que Namjoon me mantendrá al tanto de lo que tenga.

Jungkook asintió, negando preocupado por lo que pudiera tener el chico, siempre había sido muy enfermizo pero desde lo que había pasado y justamente desde que había despertado los dolores de estómago y mal comer era cada vez más grande, cosa que se había tenido que llevar a cabo una ecografía abdominal cuales resultados salían en horas del mismo día echa. Y es allí donde estaban esperando los resultados de ellas.

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Tenia sus ojos hinchados y rojos, nariz de igual color junto mejillas, mocos por todas partes y sollozos incayables, mirando a la nada perdido en sus pensamientos y acciones las cuales se recrimina cada que podía.

Su corazón se sentía pequeño al igual que el, alejar a su amor no había sido una buena opción y mucho menos no dejarlo entrar en sus horas que estaba despierto, sentía su parte racional y eficiente decirle cuando necesitaba de esos brazos fuertes y calientes, del aroma a loción varonil de su cuerpo oh de su mera presencia, otroa era su parte instintiva era más el alejamiento y el aislamiento de todos, con miedo a ser dañado nuevamente el cual su cerebro le daba y ganaba en supervivencia errática.

Aparte de sentirse el mismo un rechazo para todos, se sentía un asco, un ser usado como trapo de limpia carro y como una basura al no darse cuenta del gran trabajo se que hacía allí afuera por el, de todos los que lo querían aportaban su parte para poder apoyar y hacerlo sentir cómodo, tranquilo y en paz a pesar de todo, que estaban dispuestos a arriesgar su propio pellejo tan solo por hacer justicia lo sucedido.

 Estaba tan sumergido en su burbuja de dolor y sufrimiento que no veía el gran sentimiento que tenía de todos, se dañaba el mismo con sus pensamientos y forma de actuar que ya era realmente cansado solo pensar en volver a despertar y ver la misma rutina que llevaba en esos días.

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UNTOUCHABLE  - KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora