Juliana: Está dormida, digo por si quieres verla, no se dará cuenta.
Franco: Gracias (sonrió y salió corriendo a la habitación).
Juliana: Nahi me va a matar lo se pero todo sea por mi sobrino (pensando).
Franco entró y ella parecía un ángel, se acercó lentamente y le acarició el cabello, puso la mano en el vientre y sus ojos se llenaron de lágrimas...
Franco: Perdoname hijo, te hice daño sin saber que estabas aquí, lucha por favor tu mamá y yo te necesitamos, eres muy pequeñito pero ya te amo con toda mi alma y también a tu mamá, ustedes dos son mi vida.
Nahia: Que haces aquí?
Franco: Solo quería verte.
Nahia: Ya puedes irte.
Franco: Nahia, mi amor por favor (se acercó).
Nahia: Vete.
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Franco: Está bien, me iré de la habitación pero no del hospital, voy a cuidarte aunque no quieras a ti y a mi hijo.
Nahia: Ahora si piensas que es tu hijo? ahora después que dudaste?
Franco: Se que dude, soy un idiota pero...
Nahia: Ya Franco dejame sola, vete!!
Franco salió de la habitación y Nahia se desmoronó, sentía que la vida otra ves hacia de las suyas, por eso no creía en la ni siquiera en el amor...
Nahia: Todo en algún momento termina, lo sabías Nahia, lo sabías y te enamoraste maldita sea!! Rompiste la promesa de jamás enamorarte y mira lo que pasó, para que...(miro su vientre) se que tu no tienes la culpa (puso su mano) pero no sé ni siquiera si podré ser una buena madre, no quiero que sufras como me tocó a mi, en esta vida hay cosas malas sabes, por eso a veces tienes que hacerte fuerte y muy dura y no confiar ni en tu sombra (mientras una lágrima caía).
Pasaron unos días y por fin Nahia pudo volver a la hacienda, aún con reposo absoluto hasta que el médico diga que esta todo bien...
Juliana: Ya sabes, nada de levantarte, solo al baño y ya.
Nahia: No me trates como una niña Juliana.
Juliana: A veces pareces una y además te conozco, tienes que cuidarte (se sentó a su lado) por el bebé (puso la mano en su vientre) aún no puedo creer que voy a ser tía!! Pensé que ya no lo sería eh.
Nahia: Mhm.
Juliana: Nahi...que sientes por el bebé? Lo quieres?
Nahia: Es mi hijo, no? Por supuesto que lo quiero pero no es algo que esperaba y aún no se qué siento, no me pidas aún sentir algo, si todo estuviera bien quizá estaria más emocionada pero todo se vino encima con Franco.
Juliana: Que pasará con él?
Nahia: Nada, no pasará nada, con su desconfianza el mismo acabo con todo.
Juliana: Pero lo amas aún?
Nahia: Ya no quiero hablar, estoy cansada.
Juliana: Está bien, aquí estaré si me necesitas.
Franco: Y yo (entrando).
Nahia: Que haces aquí?
Franco: Se que no me quieres aquí pero no me voy a mover, voy a ayudar a Juli a cuidarte.
Nahia: Tú aquí tienes que trabajar niño y ya te dije que no te quiero aquí dentro.
Franco: Has lo que quieras porque no me moveré.
Nahia: Que no se te olvide que soy tu jefa.
Franco: Pero también la madre de mi hijo así que descansa, iré a organizarme en la recámara de al lado, permiso.
Nahia: Franco, Franco!! Ash.
Juliana: Nahi no te pongas así, te hace mal, tranquilizate.
Nahia: No quiero a ese idiota en mi casa.
Juliana: Sabes que no puedes hacer nada, es tan testarudo como tú.
Nahia: Si no lo sacas tú lo hago yo (tratando de levantarse).
Juliana: Tu no vas a ningún lado (tomándola del brazo para que no se mueva) sabes que no puedes levantarte.
Nahia: No lo quiero aquí...Auch!
Juliana: Ya ves, Nahia ya déjalo sabes que no se irá.
Nahia: Mejor voy a dormir, déjame sola tu también.
Juliana: Te quiero eh (saliendo y sin obtener respuesta).
EN LA NOCHE
Franco: Aquí tienes la cena.
Nahia: No tengo hambre.
Franco: Tienes que comer porque tienes unos medicamentos que tomar, además ahora son dos, tienes que alimentarte.
Nahia: Dije que no quiero y más te vale que mañana temprano estés trabajando porque no te pagaré.
Franco: No se preocupe "jefecita" haré mi trabajo y luego vendré a cuidarlos.
Nahia: Que parte no entiendes de "déjame en paz" o prefieres que te despida?
Franco: Hágalo, me puede despedir de mi trabajo pero no me iré de aquí porque cuidaré de mi mujer y de mi hijo.
Nahia: No soy tu mujer que te quede claro y eso lo decidiste tu.
Franco: Nahia...
Nahia: Nahia nada!! Te di todo de mi, hasta lo que ni yo sabía que tenía para dar y eso porque me arriesgue a amar lo que siempre me negué para no sufrir y mira lo que pasó, así que no pidas conocer otra Nahia que no sea la que viste por primera ves, la que jamás tendría que haber dejado de ser.
Franco: Mi amor no digas eso, se que fue mi culpa pero perdoname, me equivoque pero te amo y a nuestro hijo...
Nahia: Un hijo que no sabemos si nacerá, que aún esta en peligro y si, siéntete culpable porque siiii es tu culpa, si él logra sobrevivir no se qué pasará, quizá puedas verlo pero lo nuestro hazte la idea de que nunca existió, nunca!!
Juliana: Pasa algo? Nahia sabes que no puedes alterarte.
Nahia: Nada, acompáñame al baño.
Franco: Yo...
Nahia: Dije Juliana.
Juliana: Si, si vamos.
Franco se fue a la habitación donde no pudo parar de llorar y pensar, en su mente solo estaba el "siiii, es tu culpa" sabía que si había vuelto esa Nahia que él conoció era su culpa pero aunque le dolía el alma decidió volver a su ranchito, sabía que estaba cerca y que Juliana le daría noticias de Nahia, solo por los mal entendidos y unas palabras todo se vino abajo...
