CAPÍTULO IX:
CASA NEIBOLT
Luego de un par de rápidos minutos, Abby y Richie llegaron a la calle Neibolt y, al igual que todos sus amigos, tiraron las bicicletas y se sumaron al grupo posicionándose al lado de Ben, quien les dió una rápida sonrisa.
Al parecer Beverly estaba intentando que Bill no entrara a la casa, al menos no solo.
— Pero, ¿Que pasará cuando desaparezca otro Georgie? ¿U otra Betty, otro Corcoran?, o peor, ¿Uno de nosotros? ¿Fingiremos que no sucede nada?—, Bill se tomaba sus debidos segundos para hablar sin tartamudear. Lo estaba logrando.—. Yo no haré eso.
La voz de Bill había empezado a temblar, más no tartamudeaba. Abby había notado que su labio inferior temblaba y sus ojos se llenaban de lágrimas.
— Cuando vuelvo, yo solo veo que Georgie no está ahí. Su ropa, sus juguetes, sus animales de peluche, pero él no está—, continuó mientras le daba una mirada rápida a sus amigos, deteniéndose en Abby, pues suponía que ella, en cierta parte, entendía.—. Así que entrar a esta casa, para mí, es más fácil que entrar a la mía.
Bill dejó de hablar y se dió la vuelta tomando el picaporte de la puerta. Abby sintió como su pecho se oprimía y por un segundo creyó que Richie también lo había sentido con ella, pues al mismo momento el chico volteó a verla y tomó su mano.
— Wow.
— ¿Qué?
— Que no tartamudeó.
Luego de que Richie terminará de hablar, todos dieron un par de pasos al frente dispuestos a ir
con Bill, Abby se quedó al lado de Stan, por lo que su mano y la de Richie se soltaron, captando la atención del de lentes.— ¡Esperen!—, frenó Stanley a todos, los perdedores lo miraron.— ¿No creen que alguien debería vigilar?...Solo en caso de emergencias.
Algunos estuvieron de acuerdo. Decidieron hacerlo por votos, pero todos menos Bill y Beverly levantaron sus manos. Abby no dudaba, ella no quería volver a ver a su hermano, pero si debía entrar y ser lo suficientemente valiente para sus amigos: lo sería y entraría.
Finalmente decidieron hacerlo por palitos, quienes agarraran las ramas más pequeñas de la mano de Mike, entrarían, los demás vigilarían la puerta.
Terminaron entrando Richie, Bill, Eddie y Stanley. El judío claramente no quería entrar, pero aún así lo hizo.
Afuera se encontraban Ben, Mike, Beverly y Abby. Las últimas hablaban bastante aburridas, Beverly algo enojada de que Bill no la dejara siquiera sacar una rama, a Abby le parecía algo tierno por más que Ben le diera cierta pena.
Abygail también había notado el suspiro de alivio de Richie al ella sacar una ramita corta.
Se escuchaba la voz de Richie quejándose con bromas sobre como perdió, pero poco a poco la charla fue escuchándose menos hasta disolverse completamente, como si la misma casa quisiera que nadie los escuche ahí dentro.
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Killer queen ; richie tozier ✓
FanfictionRICHIE TOZIER. | amarnos tanto que el miedo se vuelva la segunda opción. En donde Abygail McMiller vuelve a Derry luego de cinco años bajo el terrible miedo de perder a sus amigos. O donde Richie Tozier se enamora perdidamente de su...