CAPÍTULO VI:
DIAS DE DESCANSO
El club de amigos habían decidido indagar un poco más acerca de los sucesos de Derry, pero para eso necesitaban conseguir unas cuantas cosas de las cuales Ben y Bill se encargarían mayormente. Por otra parte, el resto de los perdedores habían decidido tomar los días que sus amigos buscarían sus materiales como descanso, para salir y fingir que nada estaba sucediendo.
Beverly pasaría el viernes y el sábado, con su tía y sus primos, volvería el domingo.
Stan debía ayudar a su padre con la sinagoga, además de que también debía continuar estudiando sobre la Torá.
Mike debía ayudar a su abuelo en la granja.
Y Eddie le había prometido a su madre que la ayudaría a realizar la limpieza profunda del baño de su casa.
Tan solo quedaban disponibles Richie y Abby, así que decidieron salir solos a pasear por Derry. Abby se prepararía, vistiendo una camisa hawaiana junto con un overol y unas botas de tela, se veía bastante bonita.
No necesitó maquillarse, pues ya estaba llegando tarde y temía que Richie pensara que ella lo había dejado plantado y se fuera, así que simplemente apuró el paso hasta llegar al centro de Derry.
Visualizó al chico, el cual también tenía sus típicas camisas hawaianas junto con un short de jean, habían venido combinados sin darse cuenta. Se acercó a su amigo, dándole un leve susto al tocar sus hombros por detrás. Un grito agudo salió de su boca y se dió vuelta mirando a la chica.
— Es decir, ¡Ah, que susto me has dado!—, forzó su voz haciéndola grave mientras ponía una mano en su cadera, y otra en su pecho inflado. Ambos rieron para luego saludarse con pequeño abrazo.—. ¿A donde le gustaría ir, bella damisela?
Abby rodó los ojos y le siguió el juego a Richie, poniendo una mano en su mentón de forma delicada.
— Bueno, Sir. Rirchad Tozier, me complacería que usted aceptara dar una vuelta por este pequeño pueblo al que llaman Derry, ¿Un batido, tal vez?
Richie asintió con una sonrisa en su rostro, le ofreció su brazo a Abby subiendo y bajando sus cejas con una sonrisa algo picara en su rostro. Abby negó con gracia y tomó su brazo, comenzando ambos a caminar hacía el pequeño local de batidos.
Al llegar, los adolescentes pidieron cada uno su batido. Richie de piña y Abby de fresas. Al momento de la castaña querer dar el dinero para pagar su batido, Tozier se lo arrebató de la mano y terminó pagando él, devolviéndole el billete con una sonrisa.
— Déjame ser caballero por un momento, muñeca.
Abby se sonrojó notablemente al escuchar el apodo de su amigo hacia ella, pero supo ocultarlo bien dándose la vuelta y observando el gran reproductor de música que animaba el lugar. Mientras la chica que atendía a los adolescentes servía el batido, Abygail se dispuso a observar a Richie de forma disimulada.
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Killer queen ; richie tozier ✓
Fiksi PenggemarRICHIE TOZIER. | amarnos tanto que el miedo se vuelva la segunda opción. En donde Abygail McMiller vuelve a Derry luego de cinco años bajo el terrible miedo de perder a sus amigos. O donde Richie Tozier se enamora perdidamente de su...