Capítulo veintidós
Un mes después
Parte 1
Annabeth
Hoy es.
El día que se decida si pasaré la mayor parte de mi vida en una celda ... o si podré vivir mi vida como persona libre.
Decir que estoy nervioso es un eufemismo. Estoy aterrorizado. Solo quiero que todo esto termine ahora.
Apenas dormí anoche, mi mente corría tanto que no podía relajarme. Me siento agotado. Me pica la espalda, pero están sanando y sé que si me rasco, se abrirán y se infectarán una vez más.
Un oficial de la prisión abre mi celda y desliza una bandeja de comida por el suelo. Normalmente, el oficial no me hablaba, pero esta vez el hombre dice: "La detective Susan Walker estará aquí para hablar con usted en breve."
Asiento en respuesta y él se va. Recojo la bandeja de comida y la descanso en mi regazo. Ver la comida me revuelve el estómago y vomito ruidosamente mientras vuelvo a colocar la bandeja en el suelo. Respiro profundamente y levanto las rodillas contra mi pecho.
"No hace mucho tiempo, Annabeth", me susurro. "Todo terminará pronto."
Cierro los ojos y me quedaré dormido, solo por un rato, hasta que alguien venga a recogerme. Sin embargo, antes de que pueda caer en un sueño ligero, escucho pasos a lo largo del piso de concreto fuera de mi celda.
Sé instantáneamente que es el detective Walker.
Abro los ojos mientras ella suena las llaves de mi celda. Balanceo mis piernas sobre el costado de la cama y descanso mis manos contra el colchón duro. Sus ojos se encuentran con los míos de inmediato, pero ella no me saluda. En sus manos lleva un montón de ropa.
"Te conseguí esto. No es nada lujoso; solo jeans y una camiseta, pero es mejor que el mono naranja ", dice ella y me los entrega.
"Gracias", respondo. Me paro y me muevo para cambiar. El detective se da vuelta para darme algo de privacidad.
"Como te sientes?" ella pregunta.
"Nervioso", es todo lo que digo.
"Eso es comprensible. Sabes que hacer; diga la verdad, responda cualquier pregunta que pueda, no se enoje."
"Estarás allí?" Pregunto.
"Sí", responde y por alguna razón me siento aliviado. Termino de cambiarme en silencio y luego me doy la vuelta una vez que estoy listo. "Ahí tienes. Te ves bien. Te quedan bastante bien. Ahora, ¿vas a comer algo de esa comida?"
"No tengo ganas de comer", respondo.
"Va a ser un día largo, Annabeth. Deberías comer algo, incluso si son solo unas pocas picaduras. No tenemos mucho tiempo, unos diez minutos más antes de que necesitemos llevarte a la camioneta. Por favor, come algo."
Me rindo con un suspiro. Recojo la bandeja nuevamente y me las arreglo para comer algo de la comida acuosa. Lo paleo rápidamente, sin darme tiempo para hacerlo sabor la comida.
"Ahí vamos. No fue tan difícil, ¿verdad? Ahora es el momento de irse. Voy a tener que esposarte ", dice ella.
"Por supuesto que sí", murmuro y sostengo mis manos detrás de mi espalda. Ella rápidamente me esposa y luego me saca de la celda.
Caminamos por el pasillo y luego subimos unos tramos de escaleras. "Tendrás que salir por el camino de regreso para entrar en la camioneta."
"Por qué?" Pregunto.
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Ángel de hormigón -COMPLETOS-
Hayran KurguAU. Escucho los susurros cuando paso. Veo las miradas lamentables en sus rostros cuando notan los moretones que trato de ocultar. Sé que se preguntan por qué no me voy. Lo entenderían si estuvieran en mi lugar, si tuvieran que escuchar las amenazas...