Capítulo 23: En los brazos correctos.

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Fue uno de esos días en los que Chaeyoung se levantaba con un sentimiento extraño en su cuerpo. Uno de esos días en donde pasaba casi toda la mañana en su cama mirando las estrellas pegadas en el techo de su habitación tratando de sentirse un poco mejor. En ese entonces, recordaba la voz de su padre aconsajandole amorosamente, diciéndole que en una de esas estrellas estaba él junto a su madre, acompañándola siempre. Sin embargo, no era suficiente para la soledad que la atacaba ese día.

Llegó tarde al trabajo, ni siquiera se bañó o alistó como normalmente lo hacía. Entonces así, mientras entraba a la agencia de entretenimiento a renegones y con una expresión perdida en su rostro, la pudo ver a ella.

A diferencia de su aspecto desarreglado, la mujer se encontraba espléndida mientras mostraba una sonrisa de oreja a oreja claramente emocionada por su primer día de trabajo.

Casi todos los presentes la rodearon para darle la bienvenida, pareció ser una persona muy importante como para ignorar su presencia. Los demás parecían nerviosos al acercarse a ella, y otros incluso eran un poco cortantes en sus respuestas.

Era justificable.

¿Quién no tendría miedo de hablar con la hija del director ejecutivo de la empresa en la que trabajabas?

"Bonita" fue el primer pensamiento de Chaeyoung al verla inclinarse reiteradas veces a los cumplidos que le daban sus compañeros de trabajo.

La rubia había estado en esa agencia por tres años, pero nunca había hecho tantos amigos como esa chica a unos metros de ella. Ni siquiera sabía que era la hija de su jefe, mucho menos lo que iba a pasar después de que su mirada chocara con la suya y se acercara para presentarse con alegría.

"¿Rosé, cierto? Soy Suzy, un gusto"

Fue el principio de todo.

Así, con esa simplicidad en sus palabras, causaría tantas cosas en su vida hasta tenerla allí, sentada en una de las escaleras de la escuela en la que estudió hasta graduarse, y ahora, estar ahí como maestra.

No lloraba, era algo estúpido llorar por eso ahora, más que todo estaba enojada, la rabia la tenía ansiosa y comiendo de sus uñas. Es que no entendía el por qué de las cosas. Ella se había largado de la empresa solamente para olvidarla. ¿Qué hacía Suzy presentándose en el escenario? Justamente cantando la canción que aquella vez la compuso y le dedicó un día antes de que todo se fuera al carajo.

"¡Chaeyoung!" La voz de Jisoo llamándola a lo lejos la alerta en su lugar. Sus piernas dejaron de moverse, sus dientes dejaron de torturar a sus dedos y su mirada se suaviza por un instante.

La rubia se pone a pensar mientras escucha su nombre más cerca de lo que esperaba.

Sus pies pisan la realidad y el presente en el que estaba.

Jisoo.

Por poco y había olvidado que ella estaba ahí siendo parte de su vida.

Chaeyoung sonríe de lado con debilidad cuando Jisoo detiene su paso apresurado frente a las escaleras.

Movía su cabeza de un lado a otro, casi con desesperación. Estaba preocupada queriendo encontrarla, lo sabía. Y la rabia en su cuerpo aumentó cada vez más cuando, al encontrar por fin los ojos de Jisoo, pudo ver en ellos un brillo entristecido, tal vez cargando la culpa de todo lo que había pasado hace unos instantes.

"Chaeyoung" Suspira la maestra, corriendo hacia la rubia hecha bolita en un rincón del escalón. "Lo siento mucho" Fue lo primero que le dice al sentarse a un lado de ella y tomar sus mejillas entre sus manos. Chaeyoung la mira sorprendida, aún más cuando veía más y más culpa en esa expresión dolida en su rostro. "Yo... Lo cierto es que no tengo idea de lo que está pasando, pero en serio lo siento. No debí traerla. Debí... Yo debía haber preguntado en primer lugar" Jisoo niega, alejándose un poco de su novia. "No sé por qué creí ciegamente. Soy una estúpida"

I have a girlfriend (Chaesoo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora