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Jungkook y Kai se encontraban bebiendo en el apartamento del del último. Se encontraban cómodamente conversando sentados en el sofá de la sala de la casa.

—Nadie me toma en serio. – Jungkook murmuró sonriente. Kai bebió de su cerveza.

—Desde luego que no, si te comportas como un patán todo el tiempo. – Respondió con reproche. Jungkook se echó a reír con diversión y Kai rodó los ojos. —Deja de reír como idiota, por cosas como esas nadie te toma en serio. –Murmuró con un soplido.

El pelinegro se encogió ligeramente de hombros antes de beber cerveza, al acabar se limpió la boca con la manga de su suéter.

—Fui bastante serio con lo que te dije. –Indicó sonriente. El rubio lamió sus labios apretados, observando la cerveza en su jarra.

—No lo sé, kook. El chico es de la clase inocente. – Soltó un soplido. —Me hace recordar a mí antiguo ser, cuando en aquel entonces yo era un chico puro, casto y abnegado, conservándose para una polla que sería la primera y la última, bastante gay de mi parte. –Rió con acidez. –¿No te parece chistoso? Ninguna de las dos cosas pasó como quería. –Resopló. Jungkook apretó los labios y miró el techo.

—Todo pasa por algo, la vida no es un cuento de hadas, Kai. – Le acarició la mata de cabello rizado que el chico tenía por cabeza. —Ahora eres más independiente, haz conocido más del mundo y tienes que darle una oportunidad a Bangchan, ¿No crees que te estás pasando con él, hermano?. –Dijo a ceja alzada. Kai soltó un soplido.

—Sólo me involucré con él, porque Sehun estaba celoso de nuestra amistad. De hecho, disfruté acostándome con él, la venganza se sintió maravillosa... –Se echó a reír con diversión.

—Estás jodido, kai. –jungkook habló con una mueca.

—¡Todo es culpa de Sehun! –El rubio despotricó en rabieta. —¿Por qué se tuvo que emborrachar tanto? Le dije que no bebiera de esa manera, pero claro según él se estaba divirtiendo y vaya que lo hizo, teniendo sexo heterosexual a destajo con una perra. ¡Ah joder! Odio a todos los bisexuales del mundo ¡Malditos perros!

Gritó como un desquiciado, agarrando la jarra de la cerveza para beberla por completo. Jungkook sacudió la cabeza y siguió acariciando el cabello de kai, se sentía bien hacerlo.

—Vas a ensuciar el sofá, bebe tranquilo. –Señaló sonriente, observándolo beber groseramente la jodida cerveza. —¿Y sabes algo de él? – averiguó con curiosidad. Kai se encogió de hombros.

—Ni idea, tampoco quiero saber. Llevo tres hermosos  meses en Seul sin saber de él, todo ha sido bastante relajante aquí contigo. –Parloteó con labios apretados. Jungkook lamió sus labios, lo miró de soslayo antes de hablar

—¿No te parece extraño que aún no haya dado con tu paradero?

Conociendo al padre de kai, obviamente el hombre había hecho algo para que el rubio pasara inadvertido en Seul. Kai  sólo se encogió de hombros.

—Tal vez no le intereso lo suficiente. –Susurró entre dientes. Jungkook se echó a reír con diversión.

—En el fondo sabes que eso es mentira, el tipo todavía te ama y técnicamente se acostó con la chica porque la confundió contigo y lo sabes.– habló, tocando un nervio.

—¡Él me engañó! Eso cuenta como infidelidad en todos los estados, Jungkook¿Qué carajos con esto? ¿A dónde quieres llegar? – Gruñó a grandes gritos. Él pelinegro bebió de su cerveza antes de contestar

—Lo digo, porque lo haces ver como si el chico hubiera querido engañarte a propósito cuando no fue tal cosa, kai. –Resopló, sintiéndose cabreado con su hermano. —Sabes muy bien que Sehun confundió a la mujer contigo, técnicamente no fue engaño ya que pensó en ti todo el tiempo. El hombre estaba bastante drogado para saber lo que hacía y el resultado de eso fue un puterío del destino. –Continuó con exasperación.

Chico Gafas «KOOKMIN»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora