La Princesa y el Shinobi.

Capítulo 21: El hombre que sabe la verdad.

Naruto pertenece a Masashi Kishimoto.

Avatar: La Leyenda de Aang pertenece a Michael Dante DiMartino y Bryan Konietzko.

La Princesa y el Shinobi.

Resumen:

Durante su tiempo en prisión, Azula tuvo sueños extraños y conocimientos de otra dimensión. Gracias a sus nuevos conocimientos, se otorgó la libertad y encontró el cariño y la compasión del Shinobi #1 Cabeza Hueca.

Naruto y Azula, estaban de nuevo en su habitación, suspirando y tratando por todos los medios, de calmar sus mentes.

Azula colocó su silla, sobre las patas traseras, mientras suspiraba y dejaba caer sus brazos, a cada lado de la silla y miraba al techo. —Vaya aventura, ¿No?

―Inesperada, por decir lo menos ―dijo Naruto, mientras soltaba un suspiro. ―Cuando... yo era pequeño, no podía realizar, ni siquiera los Jutsus más simples de la academia. Ni siquiera podía, lanzar Shurikens o Kunais bien. No podía usar el Bunshin no Jutsu, la forma más simple y era necesario dominar los tres, para así graduarte en la Academia: Shunshin, Bunshin y Kawarimi. Pero yo lo intenté más de cinco veces y seguía sin poder graduarme, solo por el Bunshin, entonces... en cambio: todos los demás, lo hicieron al primer intento y ganaron las bandanas, desde el minuto uno. ―Naruto le dio unos pocos golpecitos a su bandana ―Entonces, aparecía Sasuke en escena y.... todos lo admiraban a él. Siendo el último superviviente de un clan fundador, el clan del poderoso Sharingan, entonces todos estaban al pendiente suyo. Y yo ¿... yo solo era el contenedor del Kyūbi. Cuando pude graduarme, fue gracias a un maestro que me engañó, para robar un pergamino con varios Kinjutsu y aprendí el Kage Bunshin y el problema está, en la cantidad de Chakra requerida, solo para hacer dos o tres de ellos, pues el Chakra se reparte en formas iguales.

―Pero si te he visto crear cientos, sino miles de Kage Bunshin y puedes seguir luchando, por horas ―dijo Azula incrédula. Ella, junto a Jiraiya y Naruto, habían enfrentado a algunos Nukennin de rangos C, B y A, reclamando recompensas en países menores.

―Porque tengo grandes cantidades de Chakra, gracias al legado del Clan Uzumaki, por mi madre. ―le explicó el rubio a su novia, quien se sonrojó por obra de su arrebato y volvió a sentarse ―Fui colocado junto a Sakura y Sasuke, bajo la "atenta" ―Naruto hizo comillas con los dedos ―mirada de Kakashi. Él nos enseñó poco o nada, a Sakura y a mí. Solo aprendí a caminar sobre superficies verticales, como un ejercicio de Control de Chakra y después de eso, todavía tenía un estilo del asco para todo lo demás: Taijutsu, Shurikenjutsu, Ninjutsu inexistente... Cuando Jiraiya se quedaba dormido, yo me marchaba a distintos pueblos, para buscar en sus bibliotecas, toda clase de Ninjutsu, Genjutsu, métodos de Taijutsu y más. Aprendí todo esto, a lo largo de los tres años de entrenamiento, incluyendo mis elementos de Chakra.

Azula suspiró y miró hacía la mesa, sin cruzar la mirada con él, mientras que la culpa, estaba allí en sus ojos. ―Perdón por sacar el tema...

―No es tu culpa. ―dijo Naruto, con una suave sonrisa, mientras acariciaba los cabellos de su novia, dándole calma. ―Solo quieres saber más sobre mí. Lo importante, es que... llevo ya mucho tiempo, perfeccionándome. Donde yo fracasaba, Sasuke obtenía elogios y era llamado genio. En cambio... me forjé en estos tres años y.... coseché mucha desconfianza, hacía Konoha, pero esta fue la aldea de mis padres. El Yondaime Hokage: Namikaze Minato y su esposa: Uzumaki Kushina.

― ¡Naruto, detrás de ti! ―dijo el Kyūbi repentinamente. Naruto formó en Fūton: Rasengan y se giró, Azula formó un Hyōton: Chakra Mezu (E.Hielo: Escalpelo de Chakra), parándose junto a su novio. ― ¡Naruto, ten cuidado! Este es el sujeto, queme controló hace dieciséis años, para matar a tus padres y destruir Konoha. Todolo que has sufrido, es culpa de este tipo.