THE STRONGEST ━━━━━━Naruto Boys x Male Reader

Capítulo 2: Hideyoshi-sensei ¡El hijo del Yondaime!

—Preséntense —la voz de Kakashi pronto se vio opacada por la de Naruto.

—Hideyoshi-sensei ¿Qué debemos hacer? —Naruto preguntó ignorando completamente al peli plata, sus ojos azules se mantuvieron en el hombre manco sentando a su lado.

El peli azul pareció pensar durante algunos segundos antes de alzar un dedo como si se le hubiera ocurrido la mejor idea del mundo —¿Qué les parece si nos presentamos?

Los tres Gennin asintieron de acuerdo con él bajo la irritada mirada de Kakashi.

—¿Qué debemos decir Hideyoshi-sensei? —Sakura preguntó.

Hideyoshi señaló a Kakashi y solo entonces la atención de los tres Gennin por fin estuvo en él.

—Enséñales Hatake —ni para Sasuke, ni para Sakura, mucho menos para Kakashi pasó desapercibido su tono frío y lleno de indiferencia, completamente opuesto al tono juguetón y bromista que tenía cuando se dirigía a sus estudiantes.

Kakashi carraspeó, intentando ignorar el dolor punzante en su pecho. Él también quería que Hideyoshi bromeara con él como hacían cuando eran más jóvenes, quería que le volviera a sonreír como hacía con Naruto, que lo volviera a cuidar como hacía con Sasuke, o que le volviera a responder con la calidez con la que le hablaba a Sakura.

Pero él no podía pedir eso, había llegado a ser la persona en la que Hideyoshi más confiaba, la persona más importante en su vida sin contar a sus padres, y él se había ido.

Había sido la misma escoria que despreciaba y lo había abandonado, aun cuando había prometido nunca dejarlo solo.

Había traicionado lo único que le quedaba.

Las crueles palabras que Hideyoshi le había dedicado aquel día aún se mantenían en su cabeza para torturarlo, su rostro sollozante, sus ojos azules llenos de decepción, mientras abría su boca y dejaba salir crueles palabras con la única intención de herirlo tanto como él lo había hecho.

Kakashi tenía que reconocerlo, Hideyoshi tenía una lengua de plata que sabía cómo herir a los demás, su propia boca era un arma que manejaba con mucho cuidado.

Hideyoshi conocía perfectamente el poder de las palabras, y no necesito de una venganza, ni de un arma, solo hizo falta aquellas palabras para destrozarlo por completo.

"—Eres igual a tu padre, cuando las cosas se ponen difíciles solo huyes"

Era el espadachín más fuerte, pero su mejor arma siempre serían sus palabras.

—Bueno, soy Kakashi Hatake, las cosas que me gustan y me disgustan... no, no tengo ganas de hablar de eso, mis sueños para el futuro... nunca me había puesto a pensar en ello, y en cuanto a mis pasatiempos... Tengo muchos pasatiempos.

—Solo nos dijo su nombre —ignorando por completo el comentario de Sakura, Kakashi señaló a Naruto.

—Tú, el de la derecha, te toca.

—¡Soy Naruto Uzumaki! ¡Me gusta el ramen instantáneo! ¡Odio los tres minutos que tienes que esperar para que te puedas servir el ramen! ¡Mi pasatiempo es comer distintos tipos de ramen y compararlos! ¡Y mi sueño es convertirme en el mejor Hokage; así todos me respetaran y dejaran de despreciarme!

Hideyoshi no pudo evitar pasar su mano sobre los cabellos rubios de su estudiante, dentro de Naruto ardía la voluntad de fuego, aquella que pocos Shinobis poseían, él era lo opuesto al niño frente a él, la voluntad de fuego que ardía dentro de él se había apagado hace años, cuando vio la crueldad en la aldea que lo vio nacer.