Realidad

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Olivia

Durante el camino de regreso Will se mantuvo callado, yo no quise voltear a verlo y me mantuve viendo el anochecer por la ventana, la brisa fresca golpeaba mi rostro y me ayuda a retener mis lágrimas, cuando llegamos detuvo su auto frente al hotel -Gracias por traerme- le dije bajando del auto lo más rápido que pude, sin darle la oportunidad de hablar entré corriendo al hotel, lo único que quería era llegar a mi habitación y encerrarme para que nadie me molestara

En cuanto entré una silueta humana me esperaba sentada en la cama- No sé quien eres ni a lo que hayas venido, pero es este momento quiero estar sola

-No te trató bien mi prometido por eso estás de tan mal humor- dijo mi hermana encendiendo la luz- mi prometido salió corriendo de la fiesta sin siquiera darme tiempo de preguntarle a donde iba, ya veo cual fue la razón

-Elena, yo no tengo nada ver con eso

-No, entonces por que llegaste en su auto?, estaban juntos o me equivoco- dijo acercándose a mi- me dejó por ir a buscarte 

-Yo no le pedí que fuera, ni siquiera sabes si realmente fue por mi

-Por favor, crees que soy estúpida, al menos ten la decencia de decirme la verdad, ¿por qué intentas quitarme todo?

- Yo no quiero quitarte nada

-Dices eso después de qué te enamoraste de él, de que quisieras quitármelo

-No eliges de quien te enamoras

-Pero puede elegir alejarte para no lastimar a los demás- dijo con odio

-Es lo que estoy haciendo

-Pero no estas esforzándote lo suficiente,  no te preocupes padre va a ayudarte con eso- dijo acercándose a la puerta- me pidió que te dijera que estás castigada, tienes prohibido salir del hotel hasta que las celebraciones terminen y no podrás asistir al baile de mañana, a menos que vallas con Alex Forger y te acerques a él para que convenza a su padre de que sea nuestro socio

-Lo único que les importa es el dinero verdad- dije con amargura

-Existe algo más importante que eso?

-El amor- dije observando su reacción-¿Elena tu realmente amas a Will?

-Eso no importa, igual es mío- dijo saliendo de la habitación

Elena tiene razón, no importa que ella lo ame, tampoco que yo lo haga, igual la boda sucederá y yo no voy a poder evitarlo, ellos se casarán y yo lo veré, esa es la realidad, este sentimiento me quemará el alma, pero aun así no moriré, ahora no me parece mala idea de irme, antes de que todo suceda, antes de que mi corazón termine de romperse, el valor se me está agotando, y mi orgullo ya no me parece tan importante en este momento

Me recosté sobre mi cama intentando no pensar en nada más, pero fue imposible así que decidí salir a caminar, el hotel estaba en completo silencio, tal vez por que es casi media noche y todos decidieron dormir temprano por la agenda de mañana, vagué por algunas horas por el hotel hasta que llegué a la piscina, esperaba no encontrarme con nadie, pero tal parece que hay otra persona además de mi que no pudo conciliar el sueño

-¿Qué haces despierto tan tarde Alex?- le pregunté sentándome junto a él en la orilla de la piscina

-Estaba hablando con mi madre y mi hermana

-A claro, por la diferencia de horario- él asintió

-¿No puedes dormir?- preguntó 

-No, tengo mucho en la cabeza

La sustitutaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora