Perdí

40 2 2
                                    

Olivia

Los últimos días estuvieron más agitados que nunca, el doctor dijo que tenia que recibir constantes nebulizaciones, enfermeras entraban y salían de mi habitación, todo me resultaba abrumador, no me dejaban ni un instante por petición de mi familia, ellos respetaron mi decisión y me dejaron sola, no vinieron a verme y en mi condición es lo mejor para todos, dudo mucho que les agrade verme vomitar, mi estomago está muy sensible por alguna razón, lo único que puedo comer es algunas uvas que Jim me ha traído, le agradezco mucho por hacerlo sobretodo por que es mi fruta favorita

 Durante los únicos momentos en los que puedo estar sola, repito una y otra vez en mi mente el último minuto antes de desmayarme, recuerdo el frío, el agua que pasaba por debajo de la puerta del cobertizo, el horrible olor del abono que estaba junto a mi, luego una calidez a cual me aferré, y por último completa oscuridad, supongo que la calidez  fue del momento cuando al fin me sacaron, nadie me ha querido decir quien me encontró, ni como llegué aquí, el castigo de Jay me hace sospechar de que fue el quien me rescató, estará encerrado para que no pueda decir nada, pues por lo que me enterado por los noticieros, mi familia solo a declarado que fue un intento de robo en el fui tomada como rehén, claro, siempre tomando el papel de victimas para mejorar su reputación, tengo que hablar con él y que me aclare si mi hipótesis es cierta

...

Treinta y uno de enero, no pensé pasar año nuevo en el hospital, pero parece que no tengo muchas opciones, el doctor dijo que a causa de mi pulmones era peligroso que viajara, a mi madre no le agradó mucho la noticia, así que decidió dejarme hospitalizada para acelerar mi recuperación, una vez más mi abuela trató de convencer a mis padres de cederle mi custodia, pero ellos se negaron rotundamente, supongo que lo ultimo que quieren es que yo continúe viviendo en la misma ciudad de ellos o aun peor tenga más derechos sobre la empresa que mi hermana

-¿Cómo estás?-hablando del diablo

-¿Qué haces aquí?- le pregunto soltando un suspiro

-No es obvio, vengo a verificar tu condición

-como si te importara

-Tienes razón- dijo sentándose a mi lado- me importa un bledo como te encuentres, pero parece que tu salud determina cuando podré sacarte de mi vida, solo vine a cerciorarme que no estés fingiendo para retrasar tu viaje

-Claro- dije con una sonrisa torcida- bueno, ya me viste, sigo igual, así que ya puedes irte 

-¿Por qué tienes tanta urgencia en que me valla?

-No es obvio?, no quiero verte 

-Segura que no lo haces para correr a la habitación de mi prometido?- sus palabras me sorprendieron

-¿Will está aquí?- pregunto fingiendo desinterés

-No finjas que no lo sabes

-Nunca lo hubiera sabido si tu no me lo hubieras dicho

-¿No sabias nada de él?

- No, hasta que tu lo mencionaste

-Entonces, nadie te ha dicho que es tu culpa que este aquí?

-¿Qué?- sus palabras me dejaron sin aliento

-El día que te encontraron él estuvo ahí, se encontró con los criminales y por protegerte recibió múltiples puñaladas, perdió mucha sangre, cuando lo encontraron estaba casi muerto 

-No, eso no puede ser cierto, mientes, los noticieros nunca lo mencionaron

-Claro que no, porque mencionarían que mi prometido arriesgó su vida por una chica sin importancia como tu- dijo señalándome con su dedo índice- una vez más estas arruinado las cosas, primero cuando llegaste a mi vida y ahora otra vez

La sustitutaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora