Cap.2

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Ginebra
Jonathan Parker (JP) el rey de la escuela desde que entró en su primer año.

Siempre flanqueado por el Equipo de Baloncesto, se había convertido en el sueño húmedo de cada chica que pisaba está escuela, sin embargo el soltero más cotizado nunca había tenido una novia y solo había tenido encuentros casuales de una sola vez en fiestas.

*Nadie está a la altura del gran Jonny*

Yo por mi parte era una chica que no me metía en líos, y por lo general era perfecta en todo,

Y no no lo digo con egocentrismo,

Lo digo porque siempre me he esforzado por dar mi mejor esfuerzo y un poco más.

Pero todo en Jonathan gritaba peligro así que se imaginarán mi reacción al verme frente a el en aquel pasillo balbuceando y con los cachetes rojos.

* Se masca la tragedia*

Lo primero que me llamó a la realidad fue su tono,

*¿Me estás tratando mal?*

- ¿Perdón, te diriges a mi ? - su cara fue de idiota total, o sea como si no pudiera entender mi idioma

- Creo que no hay otra chica en la escuela con vacíos aires de grandeza - soltó y sentí la ira emanar de mi sistema por mis poros como sudor

- Tu no me conoces,
¿En que te basas para juzgarme? - mis intentos de controlar la irritación no daban resultados pero poco me importaba ya - ¿Si quiera me conoces?

- Primer curso, tú estabas dando ese estúpido discurso que todos ignoran como si tu vida dependiera de ello, yo interrumpí esa estúpida mierda haciendo sonar la alarma para incendios - me quedé en shock por unos diez segundos, había practicado semanas para ese discurso porque mi papá estaría orgulloso y este cretino acaba de decir en mi cara que el lo arruinó.
- Tu !?- la rabia que emanaba de mi era realmente asfixiante.

- ¿No vas ha hacer un drama de esto, verdad Stark? - dijo para dejarme con el reclamo en la boca al marcharse sin añadir nada.

Por fin el gran evento, lo único que lograba llamarme la atención de esta noche era que al fin después de meses vería a mis padres, y si me esforzaba en que todo estuviera perfecto, ellos estarían orgullosos.

Kiro era el estilista favorito de mi madre, y nada más y nada menos el número uno en el estado, llegó cuando las luces del ocaso comenzaban a inundar todo el ambiente, Carol también sería preparada por el, así que ambos esperábamos en mi habitación por sus servicios.

A pesar de ser un profesional, Kiro tenía cerca de 25 años y era la persona más simpática que yo había conocido, para Carolina y para mí era como otro amigo.

- Kiro esfuérzate por favor - dije preocupada por conseguir la perfección.

- si no te hubieras cortado el pelo en capas sería más fácil todo nena - me regañe internamente - pero yo soy un artista, así que no te preocupes.

Cuando estuvimos listas casi parecíamos modelos, yo no podía creer que esa chica del espejo fuera la que entró desaliñada a la habitación,

Carol se veía hermosa con su cabello rubio y piel de porcelana combinaban perfectos con su vestido azul cielo,

Kiro por su parte le hizo el maquillaje perfecto, era todo lo que necesitaba.

Bajamos al salón, cuya decoración era perfecta, justo como lo pensé, cada detalle según mis más estrictas instrucciones y eso me hizo sentir realizada.

Las hermosas lámparas de cristal colgaban del techo blanco simulando gotas de agua, y las alfombras en tonos hueso con detalles dorados llenaban la estancia, las mesas ubicadas a la perfección y de forma simétrica, y los meseros sirviendo champagne no permitían que se vaciara ni una copa.

Los invitados mantenían charlas amenas, mis ojos solo seguían moviéndose para divisar a los anfitriones, hasta que los divisé, intenté mantenerme tranquila al ver a papá, pero nada me impediría saltar a sus brazos como una niña pequeña, porque siempre sería la niñita de mi papi.

El olor familiar del único hombre de mi vida llenó mis fosas nasales, mientras lo envolví en un abrazo.

- mi niñita - dijo el, las lágrimas se agruparon en mis ojos pero las controlé - con una aclaración de garganta me separé de él

- Papá, Mamá - mencioné más formalmente mientras abrazaba a La Sra. Stark,
Mi madre con su figura perfecta, y su belleza evidente siendo como siempre todo lo que yo no sería jamás.

- Has hecho un trabajo estupendo - me dijo ella con cariño

- No esperaba menos de ti, princesa - añadió Jason Stark.

Luego de trivialidades, bromas, charlas para ponerse al día y otras trivialidades, mi padre se acercó para presentarme a su invitado de honor, el nuevo jefe de seguridad de Stark Industrias , y yo por supuesto con cordialidad me presenté.

- Hija, te presento al Jefe de la policía, de Forestdale antiguo agente federal, y nuestro nuevo jefe de seguridad el oficial Parker - observé al hombre canoso que tenía delante, se veía como estos guarda espaldas de las películas que siempre le ganan a todos los mafiosos - y su hijo Jonathan Parker, que estudia en tu curso - mis ojos se clavaron en aquel chico que caminaba hasta donde estaba yo, aquel traje parecía que Dios se lo había pintado encima, su altura superaba la de su padre, la del mío y probablemente la de todos en la sala, sus ojos como los recordaba o aún mejores se clavaron en mi rostro y estuve esperando su mirada de molestia pero no llegó.

- Jonathan Parker, un placer - se presentó con esa voz suave y algo ronca que antes me hizo temblar.


*Ok, estoy nerviosa supongo que me agrada al fin poder publicar lo que escribo aún si nadie lo lee es como un alivio y me emociona, me emocionan mis personajes a los que ya les tenía cariño, espero que quien lo lea lo disfrute y también los vayan amando como yo.

Sin más...Bels.S.S.
XOXO.

Caos (a partir de tus ojos) +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora