CAPITULO 5 ©

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— No entiendo nada de lo que estás diciendo — dijo con el ceño bien fruncido, como siempre y su cabello rizado suelto como la melena rebelde de un león — los amigos de tu hermano, estás de broma

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— No entiendo nada de lo que estás diciendo — dijo con el ceño bien fruncido, como siempre y su cabello rizado suelto como la melena rebelde de un león — los amigos de tu hermano, estás de broma.

Suelto la pajita del batido que me tomaba, mis ojos recorren el lugar y vuelven a terminar en los suyos. Estaba enojada.

— era una emergencia.

— una que te beneficiaba — soltó, interrumpiendo mi excusa pensada desde que pensé decírselo, eso fue cuando tome está decisión — olvídalo, votaré a mi novio y vendrás a vivir conmigo el mes que dices.

— por supuesto que no — me apresuro a negar rápidamente — no quiero incomodar.

— no lo haces.

Sonríe con gentileza, pero se que sigue enojada.

— Es la casa de tu novio, cómo diablos lo botas por un mes.

— cuando una mujer quiere, se puede — sus palabras me llenan de envidia, nunca eh pensado así, digamos que nunca he tenido una relación en la que pueda decir eso — me estás escuchando — Me apunta con la cuchara embarrada de glaseado de fresa, unas gotas caen sobre la mesa de la cafetería y asiento rápidamente para que aleje esa cosa — pues hazme caso, vendrás a quedarte por un mes.

— no puedo.

— ¡PORQUE! — su mano chica contra la mesa y derramó algo de mi bebida.

— mierda — tomo su servilleta y limpio la mancha de la mesa — puedes tener un poco de control, toda la cafetería escuchará nuestra conversación.

— es que tú me vuelves loca de la impotencia, cómo mierda te vas a vivir con cinco hombres. Joder y para el colmo te gustaban.

— pasado, eso quedo atrás — la mentira hace que sienta una amargura y trago por la incomodidad.

— mientes — me señaló rápidamente — cuando mientes tragas y lo hiciste, todavía te gustan.

— ok, son guapos y todo eso. Pero no soy su tipo y ellos respetan mucho a mi hermano, estoy segura que nunca me tocaran — mis últimas palabras me dolió decirlas, pero al fin y al cabo es verdad — no te preocupes, solo será un mes.

— lo sé, pero eres tan tonta que hay veces que no te das cuenta de las cosas — niega mientas habla, suelto un suspiro por sus preocupaciones. Se pone peor que mi madre.

— no pasará nada, así que despreocúpate.

— espero que mantengas tu palabra — dijo comiendo de su helado.

— y Joel, como va todo con el — ellos han tenido un noviazgo desde la preparatoria, están cursando la universidad aún juntos. Solo han roto una sola vez y volvieron porque Lore pensó que estaba embarazada, desde allí no se han separado.

No se, Follen a Claudia ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora