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Cap largo🫰🏻

...

Disociando al mirar el pizarrón, se imaginaba a Dazai haciéndole una jodida felación.

Era la primera vez que experimentaba una sensación así, y ahora no dejaba de pensar en ello.

Por primera vez en su vida no había hora del día en que las imágenes del suicida entre sus piernas con el pene sumergido hasta lo profundo de su boca se aparecieran inconscientemente causándole escalofríos.

Aunque había algo que le preocupaba, o dicho de otro modo, le causaba inquietud; ¿Si ya habían llegado a eso, qué más sucedería?

Se sentía raro por pensar en esas cosas en lugar de prestar atención a la clase de álgebra aún cuando la profesora escribía y escribía cosas en la pizarra, más no podía con la incertidumbre, y Chuuya de verdad comenzaba a sentirse impaciente. Deseaba más, no sólo hasta donde habían llegado, sino que mucho más allá, y su corazón bombeaba frenético al imaginar escenarios con... Dazai.

Dazai.

¿Desde cuándo había dejado de pensar formas en las que podría asesinarlo? No tenía una respuesta clara, porque después del primer beso todo se descontrolo y de algún modo sentía que era su culpa por haberlo mencionado en primer lugar, sin embargo, esta nueva etapa en su relación que por años se basó en odiarse mutuamente comenzaba a gustarle.

Al salir de clase llegó a la conclusión de que podía buscar información en su celular durante la tarde en que su habitación estuviera vacía para evitar que Dazai lo descubriera infragante con algún vídeo porno que seguramente vería.
Quería saber más del tema; cómo se sentía hacerle una felación a alguien, como se debía hacer y sobre todo... ¿Qué sucedía después?

—¡Chuuya! —la voz alegre interrumpió su plan de salir corriendo lo más rápido posible hasta su habitación.

—Niko... ¿No deberías estar en clase? —comentó. Recordaba muy bien que el susodicho había especificado en su horario tener varias clases los viernes sobre cosas matemáticas que no entendía en absoluto, por lo que prácticamente tenía todo ese día ocupado cuando no había entrenamiento con su equipo.

—Sí debería, pero estaba aburrido y me tomé unos minutos para venir a verte.

—¿En serio? ¿Por qué?

—¿Y por qué no? —se encogió de hombros. —Pero si estás ocupado, saldré a la ciudad con los chicos está noche y me gustaría que vinieras.

Chuuya comenzó a pensar en lo mala idea que era salir esa noche. No tenía dinero y por supuesto, tenía otros planes.

—No hace falta que te preocupes por el dinero. —como si leyera sus pensamientos, lo interrumpió antes de que pudiera negarse. —Yo pagaré.

—Oh... ¡No, no! —negó rápidamente. No era la primera vez que el chico le invitaba todo y no lo sentía justo. —No quiero parecer aprovechado por eso.

—¡Por favor, no quisiera ir solo!

—Aah...

—Te veo a las nueve en la entrada. —se despidió agitando su mano en el aire al momento de comenzar a alejarse.

Chuuya bufó por la forzada invitación, pero decirle que no a su amigo era grosero, en especial cuando lo hacía de buena voluntad y nunca buscaba algo a cambio.
Se dispuso a pensar unos segundos y entonces... ¿Dijo a las nueve? Eso era suficiente tiempo para continuar con su investigación y no dejarla a medias.

...

...

...

Dazai danzaba por el pasillo dando saltitos de felicidad con sus audífonos puestos y una canción maravillosa que sonaba fuerte en sus oídos sin importarle las miradas de asco que le daban las otras personas al pasar.

Internado || SoukokuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora