Todo se volvía absurdo, abrupto, cansado.... y la vida seguía, todos habian cambiado y ella tambien también tuvo que hacerlo, era nesecario hacerlo, no podia seguir estancada en un viejo amor, en ese gran amor de juventud que habia revoloteado su corazón tanto así que escuchar el nombre Karina ocasionaba que por un momento recordara esos dulces recuerdos.
Trato de salir con diferentes chicas, cada una con una personlidad unica, pero ninguna se comparaba a ella, tal vez estaba siendo melodramática, sin emabargo, apostaba por su vida que ese dulce y tierno romance no era mas que uno efímero.
Y ahora se encontraba vagando por la gran ciudad de New York, pensando en que estaría haciendo su ex-enamorada, pero se suponia que ya habia cambiado y que ya la habia olvidado, sin embargo, solo era una mentira para engañar a su corazón y que este no sufriera mas por ella.
Todo tenia que estar encasillado, hasta lo mas insignificante se encontraba en una caja etiquetada . . . pero ya no importaba porque ya no podia ser posible volver a verla, ya habia avanzado, tenia todo lo que siempre quiso, un trabajo estable, una habitación con buena vista de la ciudad y a sus dos mejores amigas . . . que mas nesecitaba?, no nesecitaba nada mas, ya lo tenia todo completo o eso desearia estar sintiendo, felicidad . . . , pero como podría sentirse feliz si le faltaba algo en la vida, esa chispa, lo necesitaba tanto, necesitaba algo por lo cual vivir, y aunqur parezca exagerado, era una cruel infelicidad la que sentía ella, tanto le habia afectado aquella ruptura?, pues si
Y por ahora, la pobre joven se encontraba camino a su bar de siempre, uns cuantas copas a solas y siempre a las doce de la noche, porque se debe estar por sentado que no habia casi nadie que pudiera ver su triste alma, solo tres gatos de toda la vida, gente como ella, esperando a que venga su luz y los salve, pero sabia muy bien que ella no iría, se habia prometido no regresar, ella merecia a alguien mejor y no a una cobarde que se ocultaba a duras noches en un bar de cuartilla y mientras que ella iba a por la tercera ronda de licor, todos estaban en casa, todos menos ella, ningning y giselle estaban juntas, eran una linda pareja y ahora estaban en planes de tener un hijo, sus padre vivian a las afueras de la ciudad, tranquilidad y armonia decian ellos, todos estaban completos, pero que hay de ella?, que hay de esa pobre chica que aún espera volver con su media naranja
Pero no hay de que preocuparse, todas las piezas terminan encajando en cierto tiempo,tal vez no hoy, ni mañana o quizas dentro de varios y largos pesados años pero llega el punto que podran recontrarse, ese punto que terminara en una nueva historia, una nueva pieza en armonía
Sin emabargo, a veces nesecitamos a alguien que nos ayude, que nos de ese empujoncito para no rendirnos, podra parercer tonto pero todos nesecitamos ayuda de alguien y nuestra querida Minjeong nesecitaba de . . .
Kim?
Escucho una voz lejana, pero que le traia recuerdos de lo que solia ser sus dulces jovenes años de escuela
Taeyong?;- parece que el destino tenia planes unicos para ella
Oh Kim!,eres tu?!, hace tiempo.... bueno hace unos buenos años que no te veía, dejaste la escuela tan rapido que pense que te habias esfumado de la faz de la tierra;- dijo Lee emociondo y avergonzado a la vez
El joven muchacho se encontraba con la clasica ropa de chico de oficina y por lo que dejaba notar, parecia que no tenia una vida tan dura, mas bien parecia ser el jefe de alguna compañia
Oh si, bueno son cosas que pasan, crecimiento economico familiar quizas . . .
Si, pero el caso es que no es así, verdad?;- pero que rayos le pasa...
Disculpa?
Vamos Kim deja de cerrarte, lo se todo okey?, en el lapsus que te fuiste, Ningning y Giselle estuvieron con Karina, todo se veia algo deprimente sabes?, tu mamá habia mandado una solicitud para que termines tus estudios antes y bueno, a canadá fuiste, pero veraz, yo me hice amigo de Karina, fuimos a la misma universidad, cosas del destino supongo, terminamos siendo amigos, muy buenos amigos diria yo, pasaron los años, me mude a York y tuve la sopresa que trabajas en el hospital de mi suegro, quien lo diria
Oh okey, bueno bien por ti, pero yo ya me tengo que ir . . .
Vamos espera un momento, dejame terminar y luego decides que hacer, okey?;- dijo, para luego yo solo seder ante su solicitud, no tenia mucho por hacer en casa tampoco . . .
En conclusión, le termine contando a Karina sobre tu estancia en el hospital y seguro ya sabes como es no?
Termino preguntando por ti, casi la mayoría de veces, cada minuto y segundo me preguntaba por como estaria la señorita Kim, cuando volveria a por ella pero supongo que no pensabas hacerlo no? y en que termino todo? en dejar de preguntar, asi que yo ya me voy
Y en plena lluvia, Lee Taeyong se fue con unas ultimas palabras antes de cruzar la puerta de vidrio
no ha cambiado de número, nunca lo hizo y tampoco piensa hacerlo
Adios Kim
Todo comenzaba a llegar a su fin, el viento crujia con dolor, las lagrimas comenzaban a bajar y nublada ella se sentia, caminando en la funebre noche sin rumbo alguno se encontraba y con su telefono en la mano estaba, un numero por marcar nesecitaba, pero agobiada ella quedaba
Era hoy o nunca, un paso que su alma y cuerpo darian para regresar con su amada, un toque que precionar la llevaria de nuevo con ella, era hoy o nunca
No habia marcha atras, tal vez, solo tal vez, en esta historia podrian regresar y cuidarse la una a la otra, porque solo basta con un hola para traer los recuerdos viejos del ayer y esa sensacion de paz y amor juvenil que se habia quedado estancado por una separacion intranquila, regresar y florecer
No deseaba mas, solo la deseaba a ella, eso le faltaba en su vida, esa chispa que resplandecia y alborotaba su corazón en un mar de emociones y sensaciones, su querida Rina, no podia avanzar, nunca podria hacerlo, porque lo unico que nesecitaba en su vida era la persona a la que tanto amaba....
Un juntas por siempre, no recuerdas?
Solo eso
Una promesa rota que volveria a nacer
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Me gustas - Winrina
RomanceKim Minjeong era una chica común y corriente, con una familia ordinaria, tenía a su mejor amiga Giselle que la molestaba diciéndole que si le gustaban las chicas, cosa que era mentira o eso pensaba ella, eso fue así, hasta que la conoció y con solo...