Patrullero Galáctico

Capitulo 6

El silencio se apoderaba del lugar y Merus no parecía estar cerca de contestar.

—Vamos, di algo

Al ver que Merus no contestaba lo agarré de los hombros y lo moví para que reaccione.

—L-lo siento— Contestó —Y-yo

—Dime la verdad

Él suspiró rendido.

—Pues si, soy un ángel, lamento habérmelo callado— Habló algo triste

—Oye no te preocupes, no es algo que me moleste, simplemente lo sospechaba desde un principio y quería sacarme la duda— Traté de calmarlo rápidamente —Supongo que si lo mantienes en secreto debe ser por algo

—Así es

—Entonces no digas nada más, solo quería sacarme la duda

El sonrió agradecido de no seguir con el tema.

–—Por favor no se lo digas a nadie— Me pidió

—Lo prometo

Me congelé cuando se acercó a abrazarme, no tuve tiempo mi de reaccionar, al separarse, sus mejillas estaban igual de rojas que las mías, seguramente él también se sorprendió por el abrazo.

—Lo siendo, fue un impulso— Se disculpó

Asentí lentamente aún sin saber cómo reaccionar.

—Ginny ven de inmediato!— Escuché el grito de papá

Ambos fuimos rápido hacia donde estaban Goku y mi papá, quien al vernos frunció el ceño.

—Moro llegará en cualquier momento a Namek, no podemos simplemente esperar a que Buu despierte

—Yo digo que vayamos, de todos modos el estará esperando que yo aparezca— Dijo Goku

—Yo quiero ir con ustedes— Hablé

—¿Como piensan hacer eso?— Preguntó Merus —Incluso en esta nave no llegaremos antes que Moro

—Tengo mi teletransportación— Contestó Goku sonriendo

No alcancé a protestar cuando papá agarró la mano de Goku y desaparecieron del lugar.

—No debieron hacer eso— Dijo Merus preocupado

—No me llevaron, son unos imbeciles— Hablé desinteresada

Merus me miró extrañado.

—No se a ti pero a mi me sorprendió más que papá y Goku se tomaran de las manos— Dije pensativa poniendo una mano en mi mentón

—¿No te preocupa lo que acaban de hacer?— Preguntó Merus

Levanté los hombros desinteresada.

—Siempre lo hacen

—Debemos volver de inmediato al cuartel general— Habló rápidamente Merus

Los tres nos sentamos y el sujeto que pilotea la nave nos llevó directo al cuartel general. En el camino recibimos información de que Buu había despertado.

—Por que volvemos al cuartel general?— Preguntó Jaco

—La ayuda de Majin Buu es esencial

—Pero agente Merus, hay una gran probabilidad de que ya se hayan encargado de Moro, esos dos son muy fuertes, incluso un poquito más que yo— Habló Jaco

—Lo dudo— Ambos voltearon a verme —Si Moro es tan fuerte como dicen, no creo que sean capaces de vencerlo, podrán hacerle frente pero no creo que logren derrotarlo

—Pienso igual— Respondió Merus

—Ja ja, siempre uno de acuerdo con el otro, de ti era de esperarse Ginny pero de ti Merus?— Merus y yo nos miramos confundidos y luego miramos a Jaco —Está prohibido coquetear con chicas en una misión

—No comprendo lo que estás diciendo agente Jaco

—Ambos se han estado coqueteando desde que llegaron, que Ginny incumpla las reglas no me interesa porque luego se va pero tu Merus eres el elite número 1

No iba a seguir escuchando las tonterías de Jaco, me desabroché el cinturón y caminé hacía Jaco apretando los puños, Jaco se cubrió con sus brazos pero no alcancé a golpearlo porque Merus me sujetó con fuerza.

—Agente Jaco le pido que no diga ese tipo de cosas— Pidió Merus haciendo fuerza para sujetarme mientras yo hacía lo posible para escaparme de sus brazos y golpear a Jaco —Ginny te pido que te calmes

Después de un rato logré calmarme, a todo esto Merus nunca me soltó mientras que Jaco se encerró en el baño de la nave. Merus logró calmarme y volvimos a nuestros asientos, un rato después Jaco volvió y se sentó también.

Luego recibirá su castigo, su arrogancia me tiene harta, esto se lo diré a mamá.

—Eres igual de loca que Bulma— Dijo mirando por la ventana de la nave

—Jaco— Advirtió Merus en un tono amenazante que me sorprendió, el es bastante educado y tranquilo, jamás lo vi enojado, pero el tono que usó me dejó pensando un poco

—Déjalo, no te preocupes Merus— Jaco sonrió victorioso —Luego le diré al rey que Jaco garabateó una foto suya

Merus abrió los ojos sorprendido y Jaco casi se desmaya.

—¡QUE!— Gritó Jaco —Tu como sabes de eso?

—¿Eso es cierto?— Preguntó Merus sorprendido

—Así es— Respondí

—Olvídenlo, si quieren coquetearse mutuamente háganlo, yo no diré nada— Dijo Jaco rendido para luego mirar hacía otro lado

Fruncí el ceño enojada, me quité una pulsera de plata que llevaba en el brazo izquierdo y se lo tiré en la cabeza. El se dió vuelta enojado y me devolvió la pulsera de la misma forma pero logré atraparla.

El conductor de la nave parecía harto de nosotros y Merus se veía totalmente confundido.