Nur wahr...

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Sólo verdad...

Omnisciente:

Y... aquí estaban, un padre y una hija juntos, unidos tan solo por un pacto, compartiendo tan solo una cosa... ambición.

El deseo de poder los invadía a ambos.

Lía quería su derecho, quería poder, quería poseer lo que su madre algún día le dejó y sentarse en el trono de su madre para dirigir el negocio tal y como lo hacía ella.

Hay un dicho que no muchos conocen.
Pues se dice que detrás de un hombre exitoso está la brillante mente de una mujer fuerte y audaz.

La familia de Lía no era la excepción...
Quien estaba en el poder era aquella mujer rubia de ojos verdes quien se guardaba detrás de el traje de su marido para no ser descubierta y estar en el ojo público, y el padre no era más que un títere que solo servía para cerrar tratos que su esposa le indicaba.

Es por eso que en esos últimos seis meses toda su fortuna había disminuido en un abrir y cerrar de ojos. Puede que en cerca de un año el cartel ya ni siquiera fuera respetado y por eso ese hombre... Moritz klein tenía que desaparecer al cartel de Tokio hotel antes de que lograrán superarlo.

Y para eso le serviría su hija, antes de acabar con ella.

'Niña estúpida e ingenua. No puedo creer que encerio pienses que dejaré que tomes ese trono, siempre fuistes un error y una inútil, ni siquiera debería estar aquí, debiste morir en lugar de tu hermana, para lo único que sirves es para ser manipulada y utilizada, solo por eso es que tendrás unas cuantas horas más de vida.'

Ese era el sucio y despreciable pensamiento de Moritz...

Ese era su plan. Su objetivo.

Acabar con su propia sangre.

Tan solo porque la odiaba. es increíble como un incidente y un sacrificio puede llegar a provocar que un padre odiase a su hija, que la alejase de todo y de todos.

Pero aún más increíble es que cause el deseo de un padre por ver morir a su hija menor.

Y es que si, Lía no era su única hija, a demás de Adán hubo una chica, una linda pelinegra de ojos verdes, y una sonrisa tan dulce que al verla te enamorabas de ella sin pensarlo.

La princesa de papá, el orgullo de todo el imperio de las drogas que habían conseguido, una niña despiadada que se encargaría del negocio,una fuerte y poderosa chica con toda una vida por delante terminando tres metros bajo tierra por salvar a una 'inútil, un error y una inservible' según las palabras del padre de ambas chicas.

Después de todo, la princesa de papá estaba muerta y el vivía con la causante, con su nemesis en el mismo techo, e incluso respirando el mismo aire.

Por eso decidió mantenerla lejos, por eso la envío por cerca de 8 años lejos de su madre, sin el amor de un padre y con el odio del mismo por algo que Nisiquiera fue su culpa.

Aquella chica solía sentarse junto a la ventana en los días lluviosos y contemplar como aquellas gotas caían desde lo más alto mientras pensaba que tal vez debería estar muerta, que tal vez ella debería de a ver estado tirada en el piso desangrandose, muriendo lentamente y sufriendo.

O que tal vez era su padre quien un día iba a estar en lo más alto y de la nada caer.

Para permanecer bajo sus pies...
Tal y como la lluvia...

(...)

Lía.

Y aquí estoy yo, apunto de salir de la mansión junto con mi increíble -estupido e imbécil- padre para dirigirnos hacia la mansión de los hermanos Kaulitz.

Drugs,Cars,Money and SexDonde viven las historias. Descúbrelo ahora