Drugs,Cars,Money and Sex

vor allem Flüchtlinge...

Prófugos ante todo...

Bell:

Todo paso sumamente rápido, tanto así que ni siquiera tuve tiempo para reaccionar y cubrirme a mí y a Tom de el fuerte impacto.
Un simple parpadeo bastó para no darme cuenta de el auto que venía a toda velocidad contra el nuestro.

Lo último que sentí fue la sangre deslizándose por mi cálido rostro y un extraño zumbido ensordecedor en mis oídos. Poco después de eso fue cuando sedí y me desmayé.
Pues el impacto había Sido bastante fuerte y para mí más al a ver recibido el impacto. Seguramente termine con la cabeza abierta, aunque no estoy realmente segura de esto. Ya no puedo sentir, pero puedo oír.

Y lo que oigo es un pequeño jadeo de parte de Bill y un extraño movimiento de su parte, tal vez incorporándose en su asiento. Después un Beat que indicaba que estaba llamando a alguien y antes de poder escuchar algo más simplemente finalmente mi consciencia dejó de servirme y todo fue oscuridad por un rato.

(...)

Paredes blancas.

Luces que me estaban dejando ciega pues estaban sobre mis ojos.

Manos y piernas atadas.

¿Que mierda hago en el estúpido hospital?

Intenté tirar de las pequeñas fajas que me mantenían atada a la camilla pero cuando lo hice tuve un fuerte dolor en mis brazos y en mis costillas.

¿Que carajo?

Lo último que recuerdo es estar huyendo de la gente de el mexicano en un auto con Bill y Tom herido.
Algo debió pasar, pero qué?

Después de un rato de inmenso dolor mientras intentaba soltarme, me detuve, lo hice en cuanto alguien abrió la puerta de el pequeño cuarto y entró tan rápido como pudo.

— Bell, hay que irnos, estamos rodeados de policías.— dijo Bill con Tom en brazos mientras miraba alrededor y echaba rápidos vistazos a afuera para asegurarse que nadie viniera, se notaba sumamente nervioso y desesperado por sacarnos a todos de este lugar.

La policía era una patada en el culo.

— Desatame, no puedo hacerlo yo.— murmuré de mala gana. Mientras con la cabeza señalaba las correas.

Pronto el se acercó, depósito de manera rápida a Tom inconsciente en un sofá y me soltó.

Mis muñecas estaban magulladas gracias a lo fuerte que las correas habían Sido puestas sobre ellas.

— ¿por dónde podemos irnos?— pregunté una vez que me levanté y logré estabilizar mi cuerpo. Aunque aún me daba vueltas la cabeza. Un efecto similar a cuando te drogas.

— vamos por la parte de atrás, hay una ventana libre. La parte de atrás es bosque, huiremos por ahí, saldremos a la carretera donde nos espera nuestra gente.— contestó de manera rápida mientras pasaba una de sus brazos por debajo de los de Tom y pasaba el otro por debajo de sus rodillas, cargando lo.

— bien, demonos prisa.— dije mientras ajustaba bien la Maldita bata que me habían puesto.

Rápidamente nos escabullimos hasta el primer piso y fuimos a la parte de atrás. Lo cuál hicimos justo a tiempo pues cuando bajamos los oficiales estaban preguntando por nuestras habitaciones para arrestarnos a todos.
Eran muy ingenuos si creían que ellos nos podrían atrapar.

Una vez que llegamos a la ventana ayude a Bill a bajar, claramente con todo el dolor del mundo, estoy casi segura de que me fracture los huesos.

después tuve que reunir todas mis fuerzas para que Tom pasará por la ventana para que Bill lo cargase. Me sentía como una roba bancos.