Por siempre y jamás | Drarry

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Luego de recibir la carta de Hogwarts, a Harry le conceden una nueva habitación. Él, muy orgulloso, se la presenta a su mejor amigo, cuyo rostro mostraba una clara desilusión. 

—¿No te gusta? Sé que no es muy grande pero...

Draco se sentó sobre la cama.

—Lo siento mucho, Harry —interrumpe Draco —, mi papá me pidió que me aleje de ti, no me quiso decir porqué —bajó su mirada a sus manos, las cuales estaban sobre sus rodillas. Respiró hondo —. Pero me dijo que algo malo pasará si seguimos juntos —las lágrimas comenzaron a caer sobre sus mejillas.

—¿Tu papá ya no me quiere? —preguntó Harry, muy apenado. 

—Claro que te quiere, tú eres mi mejor amigo.

—¿Y porqué nos pide que nos alejemos?

—No lo sé. 

—¿No le preguntaste?

—No me quiso decir. Yo no quiero alejarme de ti, todo volverá a ser como antes de conocerte, no quiero que sea así de nuevo.

—Pero él no está en la escuela con nosotros, ¿cómo va a saber si seguimos siendo amigos?

Draco no responde, llora en silencio.

—¿Sólo fingiremos, no? porque quiero seguir siendo tu amigo para siempre, como lo prometimos, Draco.

Draco le extiende su dedo meñique. 

—Por siempre, Harry. 

—Y jamás —agregó riendo el niño aceptando el dedo meñique. 

Ambos niños guardaron silencio un rato, intentando asimilar esta información. Minutos después, Draco lo mira con las mejillas acaloradas.

—¿Haz besado alguna vez? —pregunta con timidez.

—No, ¿tú?

Draco negó, se observaron en silencio. Rápidamente, Draco posa un beso cortito en los labios del otro niño. 

Ambos ríen, y continúan su tarde jugando en la nueva habitación de Harry Potter.