Apariencias©

Capítulo 09: Rojo

🔪Alessio🔪

~08/12/2022~

Termino de escuchar el discurso que da el director del hospital sobre lo que sé hará para aumentar los insumos que son más necesarios. Dejo de mover el lapicero entre mis dedos y lo miro.

—¿Algo que objetar? —hace la pregunta en general.

—De hecho, sí. Siendo yo el encargo del área infantil, me gustaría decir que hay dos camas de los postoperatorios que están en mal estado y que causa malestares a mis pacientes.

—Eso es algo que ya se está arreglando. Así que le pido doctor Leone, que nos dé un poco de tiempo.

—Ya que el doctor Leone hablo de ese tema, también me gustaría tocar el tema de los transportadores de comida —habla el jefe de los auxiliares de enfermería.

Decido concentrarme en lo que debo hacer cuando la reunión termine, y repaso en mi mente los pasos de la cirugía que debo realizar en una niña de 12 años.

Mi teléfono vibra y lo enciendo para revisar de que se trata.

Frunzo el ceño cuando veo el contacto.

Violett: Foto 1️⃣

10:21 am.

Abro la foto y me enderezo con rapidez al ver de qué se trata. Aprieto mi mandíbula de la rabia, pero al mismo tiempo mi cuerpo empieza a hormiguear.

Son sensaciones y reacciones que, en mí, generalmente no van de la mano.

Me levanto de la silla y salgo de la sala de reuniones ignorando los murmullos y llamados de mi jefe. Llego al ascensor y presiono el botón que quiero, buscando llegar al estacionamiento, que es en donde está mi auto.

A lo que llego, subo sin perder tiempo y empiezo a conducir. El tráfico empieza a desesperarme y presiono el claxon, mientras mi enojo aumenta.

En el momento en que el camino queda despejado, presiono el acelerador y no lo suelto hasta que quedo frente a mi casa.

Todo por fuera parece normal, pero como la conozco, sé que es normal para ella, no dejar señal de su rastro. Ingresa y lo primero que noto en el ambiente es una leve muestra de su perfume.

Llego a la sala y ahí encuentro a Blood, reposando en el brazo de su sillón favorito.

El gato, apenas me ve, camina hacia donde estoy y lo tomo en brazos.

—Hueles a esa víbora —maúlla —. ¿Ya se fue o sigue en mi bañera? —otro maullido.

La dejo en el suelo y camino directamente hacia al baño, Sin embargo, apenas entro al cuarto me detengo de golpe al ver unas gotas rojas en las baldosas grises.

Sigo el camino hasta llegar al baño y pongo los ojos en blanco, al ver la tina llena de agua roja.

—Ni siquiera te dignas en limpiar —murmuro.

Nada aparte de la bañera está distinto y cuando me dispongo a salir de ahí, veo un papel sobre la mesita de cristal de donde ella sacó la bomba de baño. Mi bomba de baño.

"Linda bañera, y disculpa el desastre. No me dio tiempo de limpiar"

Arrojo en papel al agua y este se hunde poco a poco. Salgo del cuarto de baño, para ir a revisar las cámaras de seguridad, pero cuando no doy ni el primer paso para salir de la recámara, siento un golpe en la espalda seguido de un dolor que me hace caer de rodillas.