EL AMOR DE UN PRÍNCIPE SAIYAN

Capítulo 11: la despedida

A la mañana siguiente, los chicos vinieron a despedir a Trunks que volvía al futuro para eliminar a los androides después revivirlo gracias a las bolas de dragón.

Todos te deseamos buena suerte, hasta tu padre.

Después de eso dejo de entrenar una temporada hasta volvió a hacerlo, pero él ya no buscaba ser el más fuerte no tenía motivación.

Bulma: oye Trunks que te parece si continuamos más tarde...
Ahora quisiera descansar un rato, sí
Trunks: si mamá, nos vemos más tarde

Me recoste sobre la tumbona y comencé a recordar...

Vegeta estaba tan decaído después de aquello, nunca lo había visto así, así que le deje su espacio, yo mejor que nadie conocía su orgullo y sabía cómo estaba sufriendo, pensé incluso que se marcharía sin decir si quiera adiós, pero... no fue así.

Estuvo en su cuarto tres días, sin comer, sin dormir, mirando tan solo a través de la ventana, podía verlo desde mi balcón, cada vez que miraba estaba allí plantado... pero al cuarto día cuando desperté y mire hacia allí ya no estaba, y pensé que se habría marchado.

Por eso me sorprendí cuando tocó a mi puerta y antes de que pudiera preguntar quién era, él abrió la puerta, no llevaba su armadura, no la llevaba desde que volvió tras la derrota contra Célula, pero allí estaba vestido de sport, guapísimo y sonriendo con esa sonrisa que sólo él tiene.

Bulma: Vegeta... no te has ido aún...
Vegeta: no
Bulma: Vegetaaaa (y me arroje llorando a sus brazos)
Vegeta: Bulma... (cogió mi barbilla con su fuerte mano y me la levantó para que le mirara)

Yo no podía parar de llorar, no quería que se fuera, no, no quería, le amaba aunque él no quisiera, aunque él no me amara...

Vegeta: Bulma... te amo

Pare de llorar y lo mire sorprendida

Bulma: Vegeta!
Vegeta: si Bulma, te amo, y nunca me atreví a decírtelo, te amaba cuando me besaste la primera vez, te amaba cuando estuvimos juntos en aquella isla pérdida, te amaba cuando me dijiste que me amabas, te amaba cuando me dijiste que tendría un hijo, te amaba en todos esos momentos y en muchos más, y... te amo ahora y no voy a marcharme, si tú me aceptas
Bulma: Vegeta... (le besé y le conteste), claro que te acepto Vegeta, te amo, siempre te he amado, por eso acepté lo que me ofrecías sin garantías de que cambiaras de opinión
Vegeta: entonces Bulma...
Bulma: si Vegeta...
Vegeta: aceptas ser mi esposa, aceptas ser mi princesa

No le conteste con palabras, lo hice con actos, que es como siempre entendió él las cosas, lo abracé y lo besé como nunca lo hubiera hecho antes, y él me correspondió el abrazo y el beso comenzó a ser aún más apasionado.

Nuestra pasión se desató del tal manera, de una forma que jamás llegué si quiera a soñar... y no era un sueño, era real, estaba allí, había abierto su corazón de una forma... qué jamás habría podido pensar que un príncipe orgulloso saiyan fuera capaz de hacer.

Acabamos agotados, abrazados y dormidos uno junto al otro, y jamás volvió a irse de mi lado, éramos uno solo para siempre.

Cuando despertó yo lo estaba observando así que se ruborizo pero se acercó a mi y me besó con dulzura.

Bulma: gracias Vegeta por abrir tu corazón y decirme toda la verdad, yo también te he amado desde antes de decidirme a besarte, aunque no estoy segura de en qué momento sucedió
Vegeta: Bulma...
Bulma: déjame terminar, sé que no querrás demostrar tus sentimientos delante de los demás y sabes que lo he respetado y lo seguiré respetando, esto es solo de esa puerta para dentro, fuera seguirás siendo orgulloso y arrogante, pero no importa nunca me ha importado, ambos tenemos un fuerte carácter.
Vegeta: gracias por comprender que para mí que los demás vean este lado mio es vergonzoso, humillante y a mis ojos me hace parecer débil, así es como me lo enseñaron...
Bulma: lo sé, y es por ello que no te voy a pedir una gran boda aunque me encanten las fiestas, sólo te voy a pedir que vayamos a casarnos con mis padres de testigos y nuestro hijo, no me importan los demás, sólo me importas tú (y le di un tierno beso en los labios)
Vegeta: gracias, pon la fecha que quieras a partir de mañana, porque el día de hoy lo vamos a pasar aquí, así...

Y volvió a besarme, acariciarme... sabía de la resistencia del saiyan pero a mi... me agotó por completo.

Continuará...

Escrito por Mer Lois