¿La vida puede cambiar en un segundo ?
Rose tenía nada más 15 años recién cumplidos su familia no la quería ya que en su nacimiento su madre falleció ,no le han brindan amor ,no sabe que es el amor de pareja y de familia .
James un hombre lobo Al...
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James
Rose no me quería hablar, me ignoraba todo el tiempo. Mi pequeña, me dolía cuando la veía, porque no podía abrazarla, sentir su aroma de su perfume de flores.
Veía algunos de mis hombres entrenando, mi padre miraba de lejos a mis hombres. El extrañaba tener el puesto de alfa. Desde que se fue a vivir con mi hermana y su nuevo esposo ellos dejaron el pueblo.
A veces me da ganas de decirle que se quede viviendo acá. Pero esa decisión la toma el.
Desde que mi hermana se casó mi madre quería estar cerca de ella. Cuando se enteró que esperaba a su primer hijo.
Mama se emocionó y no quería estar lejos de su primera nieta, mi sobrina Emiliana. Una niña un poco rebelde pero con un buen corazón. Tiene las facciones de mi hermana y el carácter de su padre.
Mi madre me preguntaba para cuándo le voy a dar nietos, siempre le decía que aún no.
Hasta que Rose esté preparada y estemos bien ahora no.
Yo aún no estoy preparado para ser padre y pienso mucho en rose ya que ella es la que los tendrá en su vientre y sufrirá los trabajos de parto.
Pero cambiando de tema miraba como mama iba con algunas de las trabajadoras al jardín, ella comenzó a sacar algunas plantas medicinales.
Siempre ha amado las plantas, ella no puede ver una planta porque quiere ver si es medicinal. Mi madre nació con una madre que tenía un libro de todas las plantas medicinales.
Mi abuela que murió hace diez años. Mi madre le dio su muerte pero no se agacho por nadie ni se cayó. Siguió adelanté. Le prometió a mi abuela ser fuerte y seguir cuidando a sus hijos.
Cuando quedamos nosotros con mi madre, le fue difícil ya que padre estaba en una guerra con otra manada.
Fue dos años de guerra y salimos victoriosos. Pero aun la manada derrotada aún tiene aliados y herederos. Estamos precavidos por si acaso deciden atacar.
No podemos dejar de bajar la guardia. Tenemos que estar atentos que pasa en cielo y tierra.
Rose aún estaba en la casa de mi mano derecha. Aun me preguntaba por qué no venía o es que no pensaba volver. Quería hablar con ella, abrazarla pero decidí darle tiempo. Es lo mejor para ella.
Que piense que es lo que quiere, la entenderé.
Mi lobo quiere que la busque pero tengo que darle su espacio.
No soy un hombre que me gusta ser pesado ni quiero hacer sentir incomodo a alguien, me doy cuenta y lo que hago es poner distancia con esa persona o alejarme un poco. Para que pueda tranquilizarse.
Me quedo quieto y luego voy a la cabaña me encuentro con varios guardias que tengo. Mi madre está dando tinto a varios. Para que pueden tranquilizarse.
