Posesivo (Hyunlix)

#13

Desde lo que pasó, la pareja no se había vuelto a ver. No sabían nada de ellos, no sabían cómo estaban, no sabían si estaban bien o si Felix había llegado a su casa.
A lo mejor era por vergüenza de recordar lo que pasó por la noche, tan sólo recordar ese momento escalofriante. En especial Felix, llegaría a su casa muy asustado e impactado de lo que había dicho.

Dos días después, Hyunjin había salido a pasear al perro. El día anterior le había llamado Minju y la única explicación que le dió fue de que se habían dormido temprano. Algo estúpido.

Al salir del supermercado, al otro lado de la calle, raramente vió a Felix pasear con unos auriculares puestos.
De inmediato cruzó la calle y corrió hacia él.
Cuando llegó, lo tomó de la mano y se incorporó a su lado.
Felix se asustó al sentir el toque pero cuando vió que era Hyunjin, se alivió. El chico se quitó los auriculares y se detuvo para presenciar a su novio.

—Hola, Felix.

—Hyunjin...

—Dime.

—Pues... Vamos a buscar un asiento primero.

Encontraron un asiento vacío en frente de una pista donde habían niños jugando. Había un poco de ruido y eso haría el ambiente mejor.

—Hyunjin—interrumpió Felix.

—¿Si, cariño?

—La comida que me diste... ¿Tenía algún fármaco?

Unas risas salieron del cuerpo de Hyunjin. Luego tomó la cadena de Kkami  y lo soltó para que fuese a jugar.
Se incorporó más cerca de Felix y siguió con una risa bajita.

—¿Es en serio?

—Tan en serio que como te sigas riendo, te voy a agarrar de las greñas de vagabundo que traes hoy—dijo Felix con una voz seria y aterradora.

—¿Qué te pasa? ¿En serio crees que soy capaz de hacer esa estupidez?

—¿¡Y crees que era normal que yo te hablara de esa manera!?

—Pero Felix... Tomé la comida de las bolsas que había encargado. No las había abierto.

Felix se frotó las manos en la cara y volvió a ver a Hyunjin.

—¿Me juras que no había nada?

—Te juro por nuestra relación que no había nada—repitió Hyunjin con una voz suave.

—¿Y qué pasa si terminamos ahora?

Hyunjin cortó su respiración por unos segundos y sus ojos se fueron al vacío mientras esa frase se repetía en su cabeza.

—¿De verdad?

—Es una pregunta.

—¡No! No quiero terminar contigo, Lix. Eres mi vida, eres la persona a la que más quiero, eres...

—Después de lo que pasó, no tengo ganas de seguir.

—¡Maldición! Esque todo siempre sale mal. Todas la veces es la misma mierda—dijo Hyunjin irritado como una olla de presión.

—Hyunjin, cállate... Nos están mirando.

—Me importa una mierda que nos estén mirando. Sólo voy a rogarte y a luchar por poder ser tu novio por hoy y por siempre.

Felix se quedó callado y suspiró. El ambiente de Hyunjin se detuvo, en ese momento eran solo ellos dos.

—Me tengo que ir—dijo Felix poniéndose de pie.

Hyunjin también lo hizo y lo abrazó fuertemente. Estuvo así varios segundos y luego volvió a mirar la bonita cara de su novio. En los labios de Felix, Hyunjin dejó un beso apasionado. Un beso dulce y delicioso que curaba cualquier dolor y lo mejor, era que venían de unos labios rosados y grandes.