#17

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Un día, Felix estaba ordenando su habitación. Era por la tarde, en casa solamente se encontraba su hermana mayor y él.

Cansado, se recostó en la cama y observó el blanco techo mientras pensaba en Hyunjin.

De pronto, sus pensamientos vinieron a esos momentos aterradores que pasó mientras lo humillaba frente a la gente a solas. Una nube abrumadora se formó en su cabeza. Sentía una necesidad de contárselo a alguien pero no sabía a quién. No se hablaba con Seungmin desde ya hace mucho tiempo y Jisung tampoco se había preguntado por él.

Como sólo estaba su hermana,pensaba en contárselo, pero si se lo contaba a ella, probablemente le terminaría contando a su madre y sería el fin de Felix.

Suspiró ferozmente y se levantó de la cama.
En eso, el timbre sonó.

—Ya voy yo—gritó su hermana mayor desde las escaleras.

La chica se desplazó hasta la puerta y con confianza abrió la puerta.

—¡Oh! Seungmin, que tiempos.

—Hola Rachael... ¿Está Felix?

—Claro, él está en su habitación. Vamos, pasa.

Seungmin entró con una bolsita en la mano que luego se la entregó a la hermana de su amigo.

—Es un regalo de mi madre para tí. Tu madre le dijo que ibas a ser madre, que por cierto felicidades, y te mandó esto.

—Muchas gracias, Minnie... También a tu madre, dile que la quiero mucho—sonrió la chica.

Seungmin también sonrió y se dirigió hasta la habitación de Felix, no lo había visto desde hace demasiado tiempo.
Tocó la puerta unas tres veces y dentro escuchó una voz que le indicaba que entrara.

Abrió la puerta y entró en silencio, lo hizo para sorprenderlo.

—¿Lix?

Felix se volteó hacia él.

—¿Seungmin? ¿Qué... qué haces aquí?

—¿Aún quieres sacarme de tu vida?—preguntó serio y con temor.

Felix sólo corrió hacia él y se abalanzó para darle un fuerte abrazo.

—Escúchame, todo esto es por Hyunjin.

—¿Qué quieres decir?—preguntó el rubito.

—Hyunjin es malo.

Felix soltó una risa apática y se incorporó de nuevo para mirar a Seungmin a los ojos.

—¿Vienes a decirme que Hyunjin es malo?

—Cállate y escúchame—dijo Seungmin alterado—Lo acabo de ver con Momo. Estaba probando un cigarrillo en la esquina viniendo para acá.

—¿Qué?

Felix se frotó los ojos y volvió a mirar a Seungmin.

—¿Hyunjin fuma?

—Es lo que vi—confesó Seungmin.

—¿Y crees que viene hacia mi casa?

—No lo sé...

En eso, el timbre se oyó. Seungmin corrió hasta la ventana de Felix y abrió las cortinas. Era Hyunjin, se estaba despidiendo de su amiga.

—Ya es tarde—dijo Seungmin.

—¡Escóndete debajo de la cama!—sugirió Felix.

Seungmin de inmediato hizo lo que su amigo le dijo. Mientras tanto, Felix salió corriendo de la habitación al encuentro de su novio.

—Hola, he venido a ver a Lix.

—Claro, él está arriba con-

—¡Hyunjin! ¡Qué... qué bueno que estés aquí, Jinnie!

Hyunjin lo miró un poco extrañado, no por lo que dijo, si no por el tono en que habló.

Sin embargo entró a casa con una agradable sonrisa que hizo que Felix sintiera caliente su cuerpo.

Hyunjin no dijo nada y empezó a caminar hacia la habitación de su novio. Felix no podía detenerlo porque sería muy raro y sospechoso pero también tenía miedo de que Seungmin hubiese salido de su escondite.

Hyunjin abrió la puerta... Pero no había nadie, eso al pecoso le alivió. El mayor esperó a que entrara y luego cerró la puerta.

—Felix... Me siento extraño.

—¿Por qué? ¿Pasa algo malo?

Hyunjin comenzó a contarle todo lo que sentía, simplemente cosas que Felix nunca esperó que salieran de la boca de Hyunjin. Cosas tan raras que nunca pensaría que pasarían por su mente. Era tan raro verlo evolucionar de esa manera ya que hace un pequeño tiempo era un niño demasiado tímido y ahora parecía otra persona.
Simplemente no se lo esperaba.

Seungmin estaba abajo de la cama escuchando todo con atención, se había tapado la boca para no soltar algún ruido y que no los descubrieran. Estaba asustado de escuchar todo eso, lo estaba así como Felix.

<<Hyunjin, vete ya>> decía Felix en su mente. Tenía miedo, mucho miedo. Aunque sabía que no estaba sólo y que nada podría ocurrir porque estaba su hermana y Seungmin que seguro lo ayudaría.

—¿Qué? ¿Eres tonto? No pienso hacer nada de lo que dijiste.

Hyunjin extendió la mano y le pegó en la mejilla a Felix haciéndole caer instantáneamente.
Luego de eso, se retiró dejando al pobre chico en el suelo sin tan siquiera ayudarlo a levantarse.

Seungmin al instante de haberse ido Hyunjin, salió de debajo de la cama y ayudó a Felix a levantarse.

—Felix, ¿estás bien?

—Mierda... Qué vergüenza—dijo mirando a su amigo—Escuchaste todo, escuchaste como-

—No te preocupes por ello ahora. Pero si es tu culpa haberle seguido el rollo de escucharlo.

Felix bajó la mirada y se puso serio. Aparte de que se estaba muriendo de vergüenza, también tenía miedo de otras cosas como si su hermana se diera cuenta.

—Escúchame... Debes de dejar a Hyunjin.

Felix lo miró aún nervioso.

—¿Qué? ¿Por qué me dices eso ahora?

—¿No te das cuenta? Te trata horrible.

—No, él me trata bien y me quiere mucho... Aparte es muy protector.

—Oh, Felix... No lo entiendes.

—Escúchame tu, Seungmin—dijo Felix elevando la voz—Que tengas envidia no es mi problema... Déjame en paz con mi novio y ya.

Seungmin frunció el ceño y se dió la vuelta.

—Luego no vengas diciéndome que tenía razón—dijo antes de marcharse.

Dió un portazo que a Felix le asustó.

Empezaba a sentirse inseguro que lo que la gente decía de ellos. Últimamente había recibido comentarios malos y lo peor es que no tenía con quién desahogarse. Su madre no pasaba en casa al igual que su otra hermana. Rachael estaba muy ocupada con el tema del bebé en camino. Hyunjin era su novio y no podía quejarse de él.
Jisung no había hablado con él desde hace tiempo y Seungmin le decía cosas feas de Hyunjin.

Estaba en el limbo.

Posesivo (Hyunlix) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora