Neji H. ⚪️-Sakura, entiendo el propósito de tu estudio, y lo admiro.- sus ojos se iluminaron.- y también llego a entender por que el Hokage me eligió para que te ayude, sin embargo, anoche surgió un planteamiento en mi camino el cual no puedo dejar de lado, es por ello que no puedo ayudarte, he venido porque me pareció descortés dejarte plantada.
-Oh.- fue todo, un simple oh.
-De verdad lo lamento.-susurre.
-No pasa nada, esta bien, ya encontrare a alguien que pueda ayudarme, Neji, agradezco que lo intentaras.- sonrío, moviendo ligeramente sus labios; era extraño lo que se formaba dentro de mi estomago, quizá solo era los nervios de la noticia que me dieron ayer.- Neji, quizá pienses que soy un poco entrometida, pero, ¿qué paso?, ¿cual es el planteamiento que surgió?, digo, si es que puedes platicarme, si no, lo entenderé, la realidad es que mis amigos más cercanos han estado muy ocupados, Naruto con Hinata, Ino con Sai, y Shikamaru con Temari.- lo que decía pareció más un balbuceo me imagino que por el cansancio.
-Sakura claro que puedo decirte, a decir verdad tampoco tengo muchos amigos, Lee se la pasa entrenando y bueno, Tenten ya no esta.- decirlo en voz alta aun dolía, pero no tanto como antes.- mi tío abolirá la segunda rama familiar y desea que yo sea el líder, a decir verdad se que debo aceptar sin embargo.- hago una breve pausa para saber que dire.- no lo esperaba, mi deber siempre fue proteger a la rama principal, sobre todo a Hinata, pero ella tomará otro camino.
-Oh Neji, me alegro por ti, considerando que siempre fuiste inteligente y guiarás de forma adecuada a tu clan.- suspiro.- es curioso ¿no?, pasamos unos exámenes, una guerra y algunas misiones y creo que es la primera vez que entablamos una conversación como esta, ¿quieres un poco de cafe? ¿sake?, ¿té?.- no cabe duda, es una kunoichi bastante parlanchina, la mañana era agradable, si por la mañana me hubieran dicho que estaría dentro del departamento de Sakura hablando de mi vida, sin duda me abría reído y justo eso hago cuando pienso en eso.
-Café esta bien, pero Sakura, te parece ¿qué yo prepare cafe y vaya por algún postre en lo que tu tomas una ducha?.- recordé que al salir del hospital había mencionado que quería tomar un baño y considerando mi presencia querría un poco de privacidad.
-Eso seria genial, tomaré una ducha rápida.- salió corriendo y solo alcance a escuchar.- En la esquina hay una panadería.
Al salir observe un juego extra de llaves, por lo que decidí tomarlo para cerrar la puerta.
La panadería tenia muchas opciones, no sabia qué elegir, no tenia ni idea de qué era lo que le gustaba, así que solo iba tomar un par de postres que ya estaban en pequeñas cajas. Un anciano salió de pronto y me saludo.
-Buen día joven, ¿qué desea llevar?
-Hm, en realidad no estoy seguro.- confesé.
-Oh, los postres son maravillosos, a parte de las flores, creo que son los mejores regalos para acéranos a una joven.- comenzó a inquirir de forma un tanto chismosa, lo cual me incomodo.
-Es para una amiga.- me apresure a responder.- pero es solo eso.-un breve calor se extendió por mis mejillas y gire mi cuerpo para evitar que el señor lo notará.
-Bueno, a juzgar de la dirección de donde llego, tengo una fugaz idea de quien se trata, o es la joven Galla pero creo que ella es unos pocos años mayor que usted o quizá es.- toco su cabeza.- es la hermosa doctora, la de cabello rosa, y ojos verdes.- me sobresalte un poco, ¿cómo es que ese anciano lo sabia?.- si se pregunta por que sé lo que sé, quédese tranquilo las doctora es mi clienta más especial, salvo la vida de mi esposa en una complicada cirugía, todo lo que resta de mi vida estaré agradecido.
Un brillo emanaba de sus ojos, era bien sabido que Konoha tenia a la mejor ninja medico, había muchas personas que venían hasta acá solo para tener una consulta con ella, y otras grandes naciones y pueblos pequeños pagaban para que fuera durante cortas temporadas a capacitar a otros médicos o atender a pacientes. Era increíble que ella fuera tan habilidosa e inteligente, aunque haciendo memoria, durante aquellos primeros exámenes chunin, fue la única que respondió el examen sin usar alguna técnica especial, ademas fue alumna de la misma quinta Hokage.
El anciano, me entrego una bolsa con algunos postres y tome mi pequeña bolsa, para pagar.
No, no.- negaba con las manos.- tomalo como un regalo, la doctora a sufrido bastante, su corazón estaba roto y hasta hace poco comencé a verla florecer de nuevo, y que tenga un amigo cerca de ella me pone muy feliz.- me tomo por sorpresa pero agradecí y me fui.
Al llegar al departamento toque la puerta y Sakura me abrió, no quería hacer notar que me había llevado el juego de llaves; el café estaba sobre una mesita en la sala y con algunos cojines en el piso, me invito a pasar. Nunca me di cuenta lo fácil que era hablar con ella. Tenia una opinión para todo, escuchaba atenta sin interrumpir y hacia movimientos que poco a poco relajaban el ambiente. Reímos un par de veces, otras recordamos los estragos de la guerra, hablamos de Naruto y mi prima Hinata y cómo se había tornado su relación. Y de pronto el tiempo se detuvo, en un ambiente cálido, pacifico y lleno de aromas de cafe, vainilla y cereza.
Abro los ojos con mucha pesadez y me siento aturdido, no reconocía donde estaba, inmediatamente active mi byakugan, y mire esa red de chakra, de pronto lo recordé estaba en el departamento de Sakura, inmediatamente lo desactive, no recordaba nada y me dolía la cabeza. Mire un pequeño reloj en la pared, eran más de media noche, miro la mesita y me encuentro con restos de postres, tazas de café sin terminar.
Sakura estaba en una posición incomoda, sentada en el piso y con la cabeza recargada en el sillón. Era eso por eso me dolía el cuello; nos habíamos dormido. Pasamos toda la mañana y tarde charlando, el tiempo se nos vino en cima, era evidente había trabajado toda la noche anterior, no sé como tuvo energía para estar toda la tarde conmigo, ¿o yo con ella?. Estaba adormilado, debía irme pero no podía dejarla en esa posición.
-Sakura despierta.- Susurre inclinándome hacia su oido, evidentemente no quería despertarla.- Sakura, despierta.-Nada no parecía escuchar.
Así que decidí cargarla para acomodarla en sillón, era bastante ligera a decir verdad, su piel era muy blanca, y su cabello se encontraba suelto, por lo que por cada movimiento que hacia ese olor a vainilla llegaba mis fosas nasales, a decir verdad era un aroma agradable. No se movía tal parece que el sueño era bastante profundo, cuando la deje recostada en el sillón, moví ligeramente unos mechones de su cabello que están tapando sus ojos.
Era una sensación de paz, era eso, eso era lo que ella lograba, tranquilidad.
Decidí dejar una nota agradeciendo la charla tan agradable que tuvimos. Camine hacia la puerta y recordé que tenia el juego de llaves extra, cerré la puerta con mucho cuidado de no hacer ruido, decido ir a casa por lo techos, no seria conveniente que me vean salir de su departamento a tales horas de la noche.
ESTÁS LEYENDO
Neji Hyūga: Nuevas oportunidades
RomanceLa guerra concluyó hace algunos años, pero hay heridas que no sanan, personas que aunque quieras no permanecerán en tu vida. Cada persona es libre de ir a donde su corazón le dicte. © │ Los personajes le pertenecen a Masashi Kishimoto © │Prohibido...