La noche antes de comenzar su primer año en Hogwarts, Lily Luna Potter está enfadada y deseosa de vivir sus propias aventuras, se encuentra con una persona extraña en el patio de su casa y la hace retroceder en el tiempo, tomando su lugar.
Fanfic or...
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—LILY!
—¿Mmm...?
—Es hora de que te levantes. ¡No querrás llegar tarde en tu primer día!
—Ya voy, mamá—murmuró Lily adormilada, mientras intentaba despertarse completamente.
De repente, abrió los ojos de par en par. ¡Esa no era la voz de su madre!
Lily, aún somnolienta, salió de la cama y arrastró los pies hasta la cortina. Con la vista borrosa, miró por la ventana y su corazón se hundió profundamente en su pecho. Lo sabía desde adentro, y el gran árbol en el jardín confirmó sus sospechas. "¡Todavía estoy en el pasado!" Allí, frente a ella, dentro de ese árbol, se encontraba el Giratiempo. Lily supo de inmediato que no podía quedarse ni un momento más, tenía que usar el artefacto ella misma lo más rápido posible. Pero, ¿cómo?
Cogió al azar una falda y una blusa del armario y, a pesar de su adormecimiento, se vistió rápidamente. La falda resultó ser demasiado corta, así que dejó a un lado las perchas con un rápido movimiento y encontró en su lugar una falda a cuadros en tonos gris y blanco, junto con un suéter blanco. Se los puso de prisa y corrió escaleras abajo, pasando rápidamente frente a las miradas sorprendidas de la familia Evans, que se encontraba sentada alrededor de la mesa del desayuno, y salió por la puerta trasera.
En ese momento, una voz masculina la llamó desde la puerta: —¡Lily! ¿A dónde diablos vas?
Pero Lily ya estaba corriendo hacia el árbol, y solo cuando regresó con el Giratiempo se dio cuenta de que el hombre debía ser el Sr. Evans. Dudando un poco, dijo: —Erm... ¿Papá...? ¿Papá?
—Papá—se detuvo con una cucharada de cereales en la boca y la miró fijamente.
Lily continuó:—¿Ella... uhh... te explique cómo usar esto?
—¿Tu juguete?—gruñó el señor Evans, mientras volvía su atención a las noticias de la radio.—Bueno, creo que dijiste que tenía que darle cuerda con precisión y configurar varias manecillas para que gire más tiempo. Si mal no recuerdo, el segundero y el minutero probablemente necesiten 3,600 giros o... esperen, eso no puede estar bien. Aquí tienes...—Distraídamente, extendió la mano. —Lánzalo y tocaré el violín en un momento.
—Umm, tal vez no... ah...
—¿Es 'mágico'?— sonrió Petunia mientras untaba mantequilla en su tostada.—¿Es por eso que te ves aún más fea hoy que ayer?
—¡Petunia!— exclamó la señora Evans.—Te he dicho antes sobre-
—¡Bueno, es cierto!—interrumpió Petunia.—¡Mira su cara gorda! ¡Y además tiene su estúpida falda al revés!
—No, ella no es...—La señora Evans miró más de cerca.—¡Oh, Lily, hoy te ves más saludable y radiante! Es bueno verte así en tu primer día de escuela—Miró el reloj de pared.—Vamos, come. Tenemos que irnos en menos de una hora y no quieres andar apurada.
