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Primero sintió unos suaves sollozos que poco a poco fueron aumentando en volumen hasta convertirse en un llanto casi desesperado.

-Por favor no me odie, sé que tuve que haberle dicho antes, pero sucedió lo de Gideon y olvidé tomar mis pastillas

-No te odio, no podría hacerlo, yo solo iba a decir que lo mejor sería ser más precavidos y limitarnos a dejar marcas en lugares que sean fáciles de ocultar

No entendía que le sucedía al menor, los últimos meses las emociones de este estaban por todo el lugar y el doctor tenía razón en algo, Spencer estaba cada vez más agotado, estaba un poco más delgado y claramente tenía problemas para comer.

-Vamos a la cama, necesitas descansar y cuidar tu salud - dijo mientras lo llevaba en brazos a la habitación - yo solo estoy preocupado por ti, así que mañana u otro día busquemos algún doctor que nos pueda decir como estás. Pero quiero que me prometas qué me dirás de inmediato si te sientes mal.

Ayudo al menor a quitarse la ropa y suavemente lo metió a la cama, rápidamente se deshizo de la suya y se acostó abrazándolo contra su pecho

-Lo prometo, es solo que no quiero perderlo señor - le respondió secándose las lagrimas

-Yo tampoco quiero perderte, por eso necesito que me digas si algo está mal contigo, con tu salud o con nuestra relación

-Me gusta nuestra relación, soy muy feliz con usted. Aquí me siento cómodo mostrando quien realmente soy

El sentía lo mismo, con Reid podía mostrarse tal y como era en realidad, cuando llegaban a casa podía dejar su máscara de jefe a un lado y satisfacer no solo los deseos propios, sino que también los del chico que ahora estaba en sus brazos. Pero extrañamente en ese momento no sentía deseos de dominarlo o dejar sus marcas, solo quería que estuviese tranquilo y demostrarle todo el cariño que sentía por él.

Sabía que podría ordenarle decir lo que tiene o lo que estaba mal, pero creía firmemente qué hacerlo solo seria abusar de su papel en la relación y sobre todo que, aunque Spencer fuese su sub, este tenía derecho a su privacidad y a no hablar de algo si este así lo quería, por lo que haría algo que rara vez hacia, por no decir nunca.

-Por favor, ¿no me dirías lo que sucede?

-Yo... - sintió el cuerpo del más pequeño tensarse y penso qué no respondería.

Sé quedaron en silencio varios minutos, y era más que claro que el chico no le diría. Se estaba resignado a tener que esperar cuando escucho la suave respuesta

-Recuerda el caso de hace meses, al qué fuimos justo antes de... De estar juntos

-... Si, el de la mujer infertil ¿no?

-¿Recuerda... Recuerda lo que dijo de mi antes de herirlo?

No entendía a donde quería llegar con el tema, quería preguntar pero por fin el chico se estaba abriendo con él, así que prefirió ser paciente y escuchar

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