El segundo invierno de Muriel en la tierra fue un poco más difícil que el anterior, la nieve nos impedía viajar y además pasábamos mucho frío en el coche. No dejaba de pensar en la casa tan acogedora que llegué a tener alguna vez, no tanto por mi sino por ella, que no merecía todo esto.
Pensé que el cielo se contactaría con ella, pero por lo visto habían decidido que podría valerse por sí misma, eso o tal vez se habían enterado que frecuentaba a personas no gratas. Cuando decidió hacer una visita a sus superiores unas semanas atrás le dijeron con una sonrisa "Por el momento no podemos reubicarte"Ese día en especial fue bueno, logramos encontrar un bosque en el que acampamos y asamos algunos bombones que solo yo comí, porque ella aún no se animaba a probar la comida de la tierra.
-Tal vez alguna vez lo haga
-Sabes que te engañas a ti misma, pero es mejor para mí, me tocan más bombones.Estuvimos de buen humor, todo iba muy bien y posiblemente habríamos seguido así, de no ser porque cuando estaba a punto de darle un mordisco a un bombón, una pequeña pluma se posó en él.
Me detuve y miré a Muriel que estaba leyendo un libro.-Hay alguien con nosotros.
Ella alzó la vista de inmediato, pero al igual que yo, no vio nada. Le mostré la pluma y pareció comprenderlo todo.
- ¿Crees que sea de...? - Aún le costaba un poco preguntar acerca de Aziraphale y de la conexión que teníamos o que habíamos tenido.
-No lo sé, ahora vuelvo.Me levanté y comencé a alejarme del campamento. La nieve había tapizado el suelo y los árboles, el cielo era totalmente gris, así que en general podía percibirse un aura de desolación en todo aquel paisaje.
Cuando pensé que ya había caminado bastante decidí que era mejor volver, pero al dar la vuelta vi esa silueta tan familiar a unos metros de mi. No mostraba ninguna emoción, aun cuando me miraba fijamente.-Aziraphale ¿Qué haces aquí? - le dije sorprendido.
-¿No te alegras de verme?-preguntó aún más serio.
-Sabes que no es eso
-¿Entonces? ¿Qué pasa? ¿Ya tienes a alguien más a quien cuidar?
-¿De qué hablas? Te buscamos entre los dos, Muriel creyó haberte visto hace unas semanas y yo fui a buscarte, pero no te encontré, después ella fue al cielo y confirmó que estabas ahí.
-Ah, claro, pero cuando me viste hace unos días ni siquiera me hablaste, más que para insultarme.
-No quería insultarte, pero pensaste cosas que no son, yo quería hablarte, quería preguntarte cómo estabas y por qué volviste.Ante la última pregunta su rostro cambió por primera vez y pareció entristecerse.
Hasta ahora no quería mencionar el estado en el que volvió, él siempre cuidó mucho su imagen, por lo que podría sentirse avergonzado, además al verlo más de cerca me di cuenta de que se veía diferente, le faltaba la esencia de ser sobrenatural que lo hacía destacar del resto, casi podría decir que parecía más humano que ángel. En ese caso ¿la pluma que vimos le pertenecía?
- ¿Por qué volviste? -volví a preguntar con calma.
-Yo...me expulsaron de nuevo-titubeó
Sentía que no me estaba diciendo la verdad y eso dolió aún más. No confiaba en mí.
-Lo lamento-dije-bueno, si es todo, creo que debo irme.Decidí volver porque mi amiga estaba sola y a pesar de que había progresado muy bien en sus interacciones humanas aún había ciertas cosas en las que necesitaba apoyo.
-Espera-dijo Aziraphale- si quieres se pueden quedar en la librería.
Hace unos años y hasta meses atrás habría aceptado, pero no me di cuenta de cuánto había cambiado hasta ese momento.
-No, gracias. Estamos bien.
-De verdad- dijo- perdona por cómo me comporté antes, tenía miedo.
- ¿De qué tenías miedo?
Se veía que no quería esa conversación, pero ahora ya no podía parar de preguntarle.
-De perderte-Dijo, como si lo hubieran obligado a hacerlo.¿Perderme? No se dio cuenta de que me perdió cuando aceptó el cielo antes que a mí, cuando me dijo que me perdonaba, no entendía por qué ahora sentía que me perdía.
El silencio reinó por unos segundos en ese escenario frío, nos miramos a los ojos y tuve la sensación de que sabíamos qué pensaba el otro. Solo fuimos interrumpidos por un murmullo de voces que venían del campamento, me preocupé por dejar sola a Muriel, así que corrí hacia ella y dejé a Aziraphale solo, con la nieve cayéndole sobre el cabello blanco.

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Love of my life
RandomDespués de que el ángel Aziraphel rechazara los sentimientos del demonio Crowley decide irse al cielo y dejar a su amigo. Por su parte Crowley opta por entrenar a Muriel para que cuide bien la librería. Él está resignado al abandono de Aziraphel, si...