Poema #3

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En la noche oscura, bajo el manto estrellado,
el anhelo se alza como un lamento callado,
la sangre fluye, un río carmesí en la penumbra,
mientras el deseo y el tormento se entrelazan en la lumbre.

En cada gota de sangre, un suspiro de pasión,
un anhelo ardiente que consume sin razón,
en el abrazo de la noche, secretos se revelan,
y en las sombras, los corazones desangran sus penas.

Torturas del alma, en la oscuridad se esconden,
como sombras danzantes que a la razón responden,
el deseo y el sufrimiento, en un tango macabro,
se entrelazan en un juego siniestro y sabroso.

En la noche silente, el ansia se despierta,
y la sangre que fluye, la pasión concierta,
un anhelo profundo que en la oscuridad se embriaga,
donde el dolor y el placer, en un abrazo se entrelazan.

Así en esta sinfonía de noche y anhelo,
la sangre y la tortura danzan en el duelo,
un poema oscuro, un rito de perdición,
donde la noche se tiñe de pasión y aflicción.

Poemario GóticoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora