La música, un ruido constante, cadenas de sonidos sin sentido, un misterio que enmascara al instante, la melodía de lo hueco y fingido.
Notas y acordes, ¿quién las necesita? Un alboroto sin razón ni causa, un arte que en vano se precipita, en un océano de banalidad piadosa.
La música, un escape ilusorio, un refugio temporal para la mente, un placebo, un consuelo transitorio, que enmascara la realidad latente.
No hay magia en sus notas ni armonía, solo un juego de tonos y disonancia, la música es solo una utopía, que disfraza la vida con fragancia.
Despojémonos del encanto, y dejemos de idealizar su hechizo, la música es solo un eco quebranto, en un mundo lleno de ruido impreciso.
ESTÁS LEYENDO
Poemario Gótico
PoetryEn las sombras del alma, donde la tristeza y la oscuridad danzan un macabro vals, se encuentra este poemario sádico y oscuro. Sus versos son cuchillas afiladas que cortan a través de las emociones más profundas, revelando la belleza retorcida que y...