El secuestro de Emma (+18)

Confusión

Creo que no exageraría en decir que jamás he sentido tanto miedo en la vida, jamás había sentido tanto terror, nunca creí que llorar mientras que me aferro a mi misma me brindaba algo de "falsa protección", algo así como un placebo mental

Se que no ayudará en nada, pero aún así tengo la inútil esperanza que todo se arreglara, así que así se siente la vulnerabilidad, estás consciente del inminente horror al que serás expuesto, pero aún con todo eso, se mantiene viva la esperanza de librarse de todo

Ni siquiera llegué a sentirme así el día en el que mamá murió, recuerdo a mis padres peleando en el auto, después a mamá pidiéndole a ese sujeto que bajara la velocidad, él estaba ebrio, y luego, desperté en un hospital con la abuela dormida al costado de mi cama, había estado en coma por cuatro días

En esos días, fue el funeral de mamá, a mi padre lo metieron a prisión y yo me quedé sola, él solo llegó a arruinarlo todo

Se había visto ausente durante toda mi vida y mamá tuvo que apañárselas para sacarme adelante hasta mis siete años, pero entonces, él sólo apareció un día, dijo que quería volver y formar una familia como si nada hubiese pasado, mamá se negó, obviamente

Él fue demasiado insistente, hasta llegar al punto de seguirnos al super mercado y entrar en el auto sin la autorización de mamá, este condujo y fue así como el accidente ocurrió

Estuvo encarcelado por tres años y luego, fue puesto en libertad

Los abuelos quedaron devastados por el fallecimiento de su única hija y cuidaron de mi tanto como pudieron, pero lo extraño es que jamás me sentí vulnerable, no como ahora

La puerta vuelve a ser tocada y pongo mis manos en mis oídos en un intento por salir de aquí, suena idiota, pero como dije antes, el miedo me hace creer que todo tendrá una solución incongruente y hasta un tanto fantasiosa

— Abre la puerta, ¿quieres? — cuestiona desde el otro lado y permanezco quieta en mi sitio, llorando y temblando, esto es demasiado patético y lo peor es que no puedo evitarlo

— Me harás romper la puerta y eso me molestará más — agrega e intento ponerme de pie de forma temblorosa y bastante torpe, me sostengo de la bañera y caigo debido a un fuerte golpe en la puerta, uno que me obliga a cerrar los ojos, incluso se me escapó un gemido del susto, de seguro que fue una patada

— ¡Que abras, joder! — exclama y mi cuerpo se paraliza, permanezco petrificada, con los dedos aferrados a la bañera y el corazón tan acelerado, que alcanzo a sentir mi pulso estallando en la punta de mis dedos

La puerta comienza a sacudirse, unos golpes bastantes fuertes y consecutivos se presentan y de un momento a otro, la puerta se abre de golpe y termina impactada contra la pared, mis ojos le ven con terror desde la oscuridad del baño, apreciando su silueta imponente e intimidante, la cual se mira algo exaltada debido al esfuerzo de hace unos momentos y solo me puedo concentrar en esos brazos enormes, extendidos hacia cada lado del marco de la puerta, parece sostenerse, ya parece que puedo crearme la escena de hace un rato, sus palmas postradas en la entrada mientras que pateaba sin piedad en la madera que terminó cuarteada

Mi vista permanece fija en él y retrocedo dentro de la bañera cuando entra en el baño

Mi ojo sano recorre su rostro empapado en sudor, percibo sus mejillas coloreadas de carmesí y me retraigo aún más al toparme con esa sonrisa sin gracia, sus ojos me expresan molestia, pero, esa sonrisa me inquieta demasiado

— No... — sollozo débilmente cuando camina tranquilo hacia mi apretando mi cuerpo y preparándome mentalmente para el dolor

Bajo mi cabeza como si de un pobre animal maltratado se tratara y suelto un grito del dolor cuando me toma del cabello, lo sabía