"Y con urgencia" dice ella aún con un tono burlesco y una gran sonrisa en sus labios
"¿Te parece gracioso?... ven quizás así ya no te burlas de mi"
Él se acerca y la abraza, aunque a ella aquello no le da asco, ser doctores hace que el asco ya no exista para ellos. Pero lo que no le gusta para nada es la idea de que él pueda manchar su blusa Gucci de seda.
"¡No... aléjate!" Dice entre risas
Él también ríe por su reacción. Se detiene a centímetros de ella y se observan por unos segundos hasta que la bebé se mueve en los brazos de su tía.
"¡Hey!... ¿Puedo... tomar una toalla del armario?" toma una distancia ya más considerada
"Si... perdón..." ella cambia su vista hacia su sobrina intentando que no se noten los nervios "¡Ah! Y puedes usar nuestra ducha, las otras están en remodelación"
"¿Convenciste a Derek de cambiar las baldosas?"
"Si, no pudo resistirse a mi encanto" orgullosa y sonriente presume su triunfo
Mark vuelve a reír y sólo piensa que en realidad nadie podría resistirse a ello.
"Me ducharé rápido. Ya vuelvo"
Se da la vuelta y sube las gradas hacia la habitación principal.
Addison por su parte se queda dándole su mamila a Olivia mientras la balancea sutilmente y camina de un lado a otro en la sala; le tararea una canción que su nana le contaba a ella, la pequeña la observa detenidamente con sus grandes celestes idénticos a los de su tío Derek; no pasa mucho tiempo cuando estos poco a poco se van cerrando lentamente.
Tiempo después Addison sube a su habitación, busca entre los cajones del mueble alguna frazada que tiene de su sobrina, unas de las tantas veces que han llegado a visitarlos Nancy a olvidado más de alguna cosa; y quiere aprovechar a devolver una color lila que dejaron hace varias semanas.
De un momento a otro la puerta del baño se abre, Mark sale desnudo; antes de entrar a ducharse se distrajo y olvido la toalla en la habitación y no esperaba ni imaginaba que ella estaría allí. Algunas gotas de agua recorren su cuerpo, Addison se asusta y no puede evitar que su mirada vaya directamente a él y a todo su cuerpo perfectamente tonificado. Con anterioridad ya lo a visto sin playera, al ir a la playa o en alguna tarde de alberca familiar, pero claro... jamás lo había visto completamente sin nada de ropa. Sin poder evitarlo y sin quererlo su vista se dirige hacia su parte íntima. Fue cuestión de segundos, pero parecía que hubiera sido mucho más.
"¡PERDÓN!" Sus mejillas enseguida se vuelven rojas
Rápidamente se voltea dándole directamente la espalda, ahora su vista está hacia una de las ventanas
"¡Lo siento!... no debí estar aquí, solo... solo entre por un momento"
Él ríe de una forma coqueta y arrogante, aunque le a dado un poco de pena. Toma la toalla donde la había dejado y enseguida la enrolla en su cintura.
"No Addie... fue mi culpa, no debí haber salido así"
Un momento un poco incómodo. Ambos se quedan en silencio unos minutos, esperando que el otro mencione algo para romper el momento embarazoso.
"Ya puedes voltear" dice un tanto dudoso
"¿Seguro?"
"Si, ya me cubrí"
Ella voltea cuidadosamente cargando la pequeña manta en sus manos. Está apenada, no sabe si irse o quedarse, su cerebro en ese momento no está funcionado muy bien.