Una Nueva Influencia

10

JUNGWON
Podía escuchar la voz de Niki detrás de la puerta, parecía discutir con alguien y por el tono que usaba no parecía ser una persona de su agrado, se suponía que traería a Taesuk a la empresa. Mire la hora en mi reloj y ya era tarde, a esta hora ya habrían salido de la escuela. ¿Qué demonios estaba pasando?
Me puse de pie y en ese instante la puerta fue abierta de una patada, apreté los puños al ver de quién se trataba y Niki parecía aún más molesto que yo. No perdió el tiempo y sus primeras palabras fueron quejas por haber golpeado el hermoso rostro –según ella– de Jungho, ¿era mal momento para decirle que me importaba muy poco? Tome asiento de nuevo y la dejé continuar, Niki y yo compartíamos miradas y él viró los ojos con cansancio. Pese a todo yo seguía guardandole un gran cariño a Min, ella fue mi primer amor y ahora estaba por casarse con mi hermano.

–Esa secretaria tuya, ¿sabes lo que hizo? –mire a Niki y este desvió la mirada– Me abofeteó y yo no le hice nada.

¿La señorita Lee la abofeteó? Nishimura apretó la mandíbula y pude escucharlo gruñir, algo no me estaba diciendo. Min era hermosa; sin embargo, tenía un defecto... era una mentirosa por naturaleza y al menos en eso sí se parecía mucho a mi hermano, por ende, eran tal para cual.

–Hablare con ella y haré que te pida una disculpa, ahora sal de mi oficina por favor.

–¿Disculpas? Debes despedirla –luego de eso salió de la oficina sin decir nada más.

Podía sentir la mirada de Niki que me indicaba que estaba cabreado hasta la médula, eran en esos momentos en los que me daba terror mirarlo, solía verse como un asesino con muchos años de experiencia.

–Llama a la señorita Lee.

–No puedo.

–¿Qué? –lo mire desafiante– Nishimura es una orden.

–La señorita Lee se encuentra en estos momentos con el joven Taesuk, si me disculpa veré que todo esté bien –hizo una reverencia–. Me retiro Señor Yang.

–Niki, espera, lo siento –perdía la cabeza cuando se trataba de Min.

–Te diré esto como tu amigo –se giro y ahora su mirada parecía de decepción–, no tienes derecho de exigirle a T/N que se disculpe y si lo haces juro que voy a golpearte, hay cámaras de seguridad por una razón ¿recuerdas?

–¿Qué estás tratando de decir? –me puse de pie y intenté acercarme a él.

–Deberias ver a Taesuk, creo que te necesita.

Fui a la parte trasera del comedor donde dijo Niki que estarían, en efecto se encontraban ahí. Ella parecía estar enseñándole algo y Taesuk se veía muy inmerso en aprender cada detalle de lo que le mostraba, ¿mi hijo siempre tuvo esa mirada?

No quise interrumpir y me quedé escondido detrás de una pared para verlos desde lejos, la señorita Lee había conseguido que él se comunicará un poco con ella, siendo que a él no le gusta hablar con cualquiera esto era impresionante.

–Esto no te hará ganarte el favor de mi padre –ahi estaba el hijo que nunca se callaba nada.

–No me interesa ganarme el favor del señor Jungwon con esto –ella parecía no importarle lo irrespetuoso que Taesuk había sido–. Pienso ganarme su favor trabajando duro como su asistente, me gustaría conseguir un puesto fijo y no creo que me lo de si me porto como una enfermera con su hijo.

–¿No crees que soy un mocoso? –me acerqué un poco más al escuchar su pregunta.

¿Taesuk piensa eso?

–Bueno... –ella detuvo sus movimientos y fruncí el ceño al ver que guardó silencio– Creo haber visto un moco saliendo de tu nariz.

Taesuk se sonrojo y rápidamente tapo su nariz con vergüenza, ella se rió y se disculpó por hacer esa broma.