Hannah Mason, la chica de oro de Estados Unidos es convocada para ir al mundial, con la presion de ganar pero no se esperaba que dentro de todo eso conozca a un futbolista que la enamorara, pero tiene miedo de otra desilusion amorosa.
Donde Arturo G...
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Luego de pasar a festejar con las Fénix y los Halcones me despedí de ellos para ir a mi cuarto a descansar un poco.
Al llegar a la puerta pude oír risas y al entrar vi a Emma y Jenna juntas y riéndose mientras Jenna deba vueltas probándose ropa y Emma ayudarla.
No pude evitar recordar como nosotras hacíamos eso divertirnos mientras nos probabamos ropa juntas pero ahora ella lo hacía con Jenna.
Al entrar me miraron y Jenna dejo de sonreír y Emma se separo de ella y se acercó a mi para abrazarme.
-Hannah ¿donde estuviste todo este tiempo?-pregunto mirándome.
-Fui a ver el partido de Volley de las Fenix-dije encogiendome de hombros.
-¿Las Fénix? Las que no juegan bien verdad seguro perdieron- dijo Jenna riéndose y metiéndose a la conversación.
-No, no perdieron ganaron y no juegan mal a diferencia de ti seguro que no tocaste un balon de Volley en toda tu vida-dije molesta por sus palabras a mis ahora amigas, ni siquiera sabe jugar Volley para ir criticando como juegan las que si lo hacen.
-Hannah calmate no dijo nada malo-dijo Emma en un tono molesto y mirándome mal.
-No, Emma si lo hizo las Fenix juegan bien y nisiquiera vio el partido para ir diciendo esas cosas-dije mirando a Jenna molesta.
-No se porque me atacas asi, yo solo dije lo que escuche y además ni que fueran tus amigas para que las defiendas-dijo Jenna encogiendose de hombros.
-Otra vez te equivocas si son mis amigas, asi que otra vez si no sabes mejor no opinines es mas ni hables sobre el tema porque me molesta la gente asi-dije molesta otra vez nose porque dije eso capaz es porque quiero decirle muchas cosas más.
Jenna miro abajo como si de perro regañado tratase y comenzó a querer llorar y disculparse en susurros, Emma se levantó molesta y le trató de calmar mientras me llevó fuera de la habitación.
-¿Que pasa contigo Hannah?-dijo molesta.
-De que hablas no me pasa nada Emma-dije mirándola.
-Vienes aca y sin razon comienzas a insultar a Jenna y la haces llorar ya no se que pasa contigo-dijo señalando la puerta y negando con la cabeza hacia mí.
-No me pasa nada Emma solo que Jenna me molesta con sus palabras e insultos hacia personas que no conoce-digo cruzándome de brazos.
-No dijo nada malo Hannah desde hace tiempo parece que no te cae bien y ahora solo parece para mi que la atacas sin sentido-dice Emma.
-No la ataque Emma, es solo que desde que ella llegó ya no estamos juntas como antes-digo mirándola triste.
-Asi que es eso estas celosa de Jenna, Hannah no puedes ser mi unica amiga Jenna tambien lo es no seas asi la tratas mal solo por tus celos-dice Emma mirándome molesta.
-No estoy celosa de Jenna, Emma-digo ahora un poco molesta.
-Si lo estas así que basta Hannah te comportas como una niña inmadura como para hacer berrinches, se supone que eres grande así que entiende ya no actúes así con Jenna enserió basta Hannah-dice Emma, para luego entrar al cuarto y cerrar la puerta de un portazo.
Comienzo a llorar por sus palabras la que se supone que es mi mejor amiga defendió a otra chica que recién conoce por sobre mi y me dijo cosas hirientes.
Alguien ya me dijo todo eso pero no creí que Emma fuera capaz por lo que trato de calmarme e ir por agua para estar mejor y no quiero volver a entrar al cuarto así que dicidi ir al comedor por agua.
Trate de calmarme un poco, pero no pude las palabras de Emma se repetían en mi cabeza y no podía evitar que las lágrimas dejen de salir.
Fui por agua y me senté en una mesa mientras la tomaba para calmarme.
-Hannah, ¿Estas bien?-escuche una voz decir acercándose, pero esa pregunta se quedó en mi cabeza ¿Estoy bien? Digo no por esta pelea sino ¿Estoy realmente bien?
-Hannah-dijo otra vez esa voz y al mirar a la persona vi que era Arturo.
-Si, si estoy bien no te preocupes-digo limpiandome las lágrimas o tratando.
-No creo que lo estes tu cara por lo menos dice que no-dice mirándome preocupado.
-No es nada tranquilo, no quiero preocuparte Arturo-digo mirándole tratando de darle una sonrisa.
-No pienses eso yo quiero preocuparme por ti Hannah-dice y no puedo evitar sonrojarse por sus palabras.
-En ese caso tratare de hacerte sentir mejor-dice levantándose.
-¿Cómo?-digo mirándolo sonriendo.
-Ya veras sigueme-dice caminado hacia nose donde yo solo lo sigo.
-A donde vamos-digo mientras lo sigo.
-Aqui mira-dice mirándome y señalando el área de relax.
-Bueno entonces que haremos-digo.
‐Divertirnos los dos-dice jalandome hacia la donde está la consola.
Nos ponemos a jugar y es muy divertido, el y yo vamos a otros juegos como el ping pong o la mesa del futbolito y al final luego vamos por algo de comer.
-Gracias Arturo me diverti mucho-digo.
-No tienes porque agradecer el verte divertir fue mi recompensa-dice y no puedo evitar sonrojarme.
-Gracias me diverti mucho y bueno creo que deberia volver-digo un poco nerviosa ya que no quería volver al cuarto que comparto con Emma.
-Si pero ahora me podras decir porque estabas llorando-dice mirándome.
-Bueno me pelee con mi amiga por culpa de su nueva amiga y me dijo algunas cosas y le peor tendre que verla al volver al cuarto-digo nerviosa por volver allí.
-Creo que tengo una idea-dice sonriendo.
-¿Que idea?-digo con el ceño fruncido.
-Puedes quedarte esta noche a dormir con las Fénix-dice señalando a las Fénix.
-¿Enserio? No crees que nos regañen-digo.
-No creo que eso pase-dice.
-Enserio gracias Arturo me salvaste entonces tendre que decirles a las Fénix-digo.
-Te acompaño-dice mientras voy hacia las Fénix.
Luego de explicarles lo que paso las Fénix me dicen que no hay problema y que si podía quedarme con ellas.
-Bueno creo te tienes que ir ya-dice Arturo.
-Si, pero gracias por todo enserió me ayudaste mucho-digo.
-Para eso estoy siempre me puedes pedir ayuda-dice.
-Gracias, Buenas noches Arturo-digo y luego lo abrazo.
-Buenas noches Hannah-dice en medio del abrazo, me separo y camino hacia donde me esperan las Fénix y me despido con la mano.
-¿Y? No nos vas a contar como te fue en tu cita con Arturo-dice Zoe.
-No fue una cita-digo un poco nerviosa.
-Si es no es una cita no se que lo sea-dice Delfina.
-No fue una cita solo pasamos el rato como amigos-digo mientras entramos a su cuarto.
-Eso dices pero se nota que a los dos les gustaba-dice Celeste.
-Si me gusto pasar tiempo con Arturo fue muy amable-digo.
Seguimos hablando hasta que decidimos dormirnos pero no puedo evitar pensar.
