Capítulo 7

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Fin de semana largo. Despierto y me tallo los ojos. Recupero el cien por ciento de la agudeza visual. El departamento luce intacto. No hay ruido y tampoco huella de Kris. Cuando despierta con buen semblante escucha música o enciende el televisor. Cuando se levanta hiperactiva de inmediato escucho el agua del fregadero o el chispear de la ducha. Recobro el conocimiento y salto de la cama en busca del móvil. Lo veo en el suelo y lo tomo encendido. "Mensaje de Patrick", pienso. Deslizo la pantalla y descubro una decena de textos de la señorita simpatía un tanto molesta.

_*Sam, ¿Dónde estás?*

_*Estoy preocupada*

_*Contesta ese teléfono, Sam*

_*No me avisaste que saldrías*

_*Ya vi la nota*

_*Nos vemos mañana*

_*Cuando llegues cierra la puerta con llave*

_*Cuídate, bye *

_*Buenos días*

_*¡Despierta!*

_*Hora de levantarse*

_*Voy a salir, saca las basuras*

Patrick sigue fugitivo. Aún con la necesidad a cuestas me niego a escribirle. Deseo topar con sus caricias sin importar lo vacías que sean. Anhelo ver su pícara sonrisa relumbrar mis espacios sombríos, e incluso extraño esas palabras insulsas carentes de expresión llegar a mi Messenger. Quiero tenerle presente, porque solo en la memoria nutro al recuerdo y el alma me solicita sentirle tangible. Quiero abrazarle, besarle, deshacerme en su lengua viperina, fundirme en su piel y reencontrarme en sus ojos. Gozar del buen sexo, aprender de la vida y construir juntos un nuevo comienzo. Ser el hoy y no el ayer. Tal parece que alguien lo ha eclipsado y mi sexto sentido me susurra el apellido Finick más de una vez. Traigo un nido de pájaros en el cabello y un blusón que rebasa la rodilla. Soy ese nuevo arquetipo de belleza que encaja con el estilo de la pintora surrealista más impactante de la historia: Frida Kahlo. Tomo la laptop del mueblecillo caoba y me recuesto nuevamente en la cama. Ya con la portátil en las piernas, la enciendo y espero a que haga su procesamiento normal. Se abre la ventana de Windows, presiono con doble clic el icono de internet y entro a la red social Facebook. La campanita me notifica una nueva publicación de Patrick. Me brinca el pecho. De inmediato ingreso a su biografía y el misterioso torso de perfil me da la bienvenida. Me deslizo hasta localizar la publicación.

Patrick

5 min

"Y nos complicamos la existencia con falsos amores, cuando los verdaderos nos están buscando".

Analizo el contexto de tan profundo mensaje. ¿A qué se refiere cuando utiliza la expresión de falsos amores? ¿Por qué emplea la palabra verdaderos, a los amores que todavía no llegan y que socorren su búsqueda? ¿Quién le complica la existencia? ¿Acaso seré yo? ¿Será un amor del pasado? ¿Deborah le estará buscando y será su amor verdadero? Quiero volverme un río de llanto. A casi una semana de tener el alma en un hilo, le veo conectado y aprovecho para enviar un sorpresivo saludo:

*Inicio de la conversación por chat*

*29 de Marzo 11:35*

_ ¡Hola, Patrick! mecanografío.

Patrick abre el mensaje y aparece como leído. Espero unos segundos y doy pie a comenzar la charla.

_Estaba leyendo esa frase que compartiste y me ha hecho reflexionar. Creo que cuando buscas, te ilusionas, te creas una expectativa de una persona y es frecuente que te falle... Mira: _tecleo.

Me tomo el tiempo para abrir el navegador y buscar una frase que sopese la publicación que me ha dejado con un nudo de garganta. La copio y presiono enviar. Agrego:

Antifaz de medianoche [En Librerías Digitales]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora