one-shots y especiales

despedida

Fingir alguien que no eres era lo típico para ella todos los días, era una actora increíble para interpretar su eterno papel de chica feliz.

Caminando por los pasillos de la escuela preparatoria asahiyama una rubia sonriente, de ojos ámbar, su piel rosada y fina, le sonreía a todos, su uniforme perfecto y la bandana en su brazo derecho que la identificaba como la presidenta del consejo escolar era visible para todos.

Su nombre Fuutsuyashi Uesugui la 3 hija y penúltima del matrimonio Uesugui, esta recorría los pasillos de la casi vacía asahiyama a terminar algunos documentos del consejo, pero algo la detuvo una sombra que la seguía y al voltear se vio a ella misma.

Su uniforme desarreglado, grandes ojeras en sus ojos, una cara muerta, algunas vendas en sus brazos y parches en el rostro, y sobre todo en su ojo derecho, una piel pálida, el pelo de color negro sonriéndole de forma burlona

¿Cuanto tiempo seguirás negándome¨? – le pregunto –

El que sea necesario – seca respondió tratando de ignorar a su clon – no eres real. Solo quieres que arruine mi felicidad

¿Que felicidad? – le cuestionó burlona su clon – las dos sabemos que no somos felices y nadie nos ama.

Claro que si, mitsumi nos ama el nos quiere mucho – se dijo sonriendo –

¿El amarnos? – burlona respondió – solo somos uno de sus tantos números, que seamos sus novias no quiere decir que no ama

Mientes el nos ama mas que nadie – respondio enojada –

Si de verdad nos amara no nos golpearía o olvidas que escondes detrás todo ese maquillaje – se rio mientras esta le enseñaba todos sus moretones – solo somos un capricho

No es verdad – esta negó y presura el paso a el salón que ocupaba el consejo para sus tareas –

Caminando ignorando las llamadas de si doplengagger esta se detuvo al oír la voz de su novio mitsumi, este se estaba besando con otra chica, la presidenta del club de atletismo, curiosa observo como ambos se besaban y manoseaban, quería gritarles, pero su otra ella le tapó la boca y le hizo el signo de silencio.

Vio cómo se separaron y se veían muy acaramelados, escucho la forma despectiva en que mitsumi se refería a ella como su puta personal, cosa que le dolían, poco a poco esa cara alegre pasaba a una de tristeza, una vez se fueron esta se dejó caer contra la pared con una mirada vacia.

Ya aceptaste la realidad – le dijo la peli negra burlona –

Siempre lo hizo – bajando la mirada evito verse a si misma, ver su verdadero ser tras el maquillaje y su máscara de felicidad-

¿Entonces ya sabes que hacer? – le pregunto seria –

Lo se – respondió ella mientras ella se levantó – asi el dolor se ira por fin

Si lo ara, seremos libres – le respondió mientras se desvanecía como arena arrastrada por el viento –

A paso lento, subiendo las escaleras, recordando toda su vida, era un fracaso un ser asqueroso que no debio existir por palabras de su propia madre, solo sin nadie que la consuele, aprendió a ignorar el dolor, hasta que esté la aplasto y la mato desde adentro para ser solo una cascara vacia sin motivos para vivir

Si se lanzaba desde la azotea el dolor por fin se iria, y todos serian mucho más felices, ni siquiera sabia por que escribió su carta de suicidio ese día y le saco copias que dejo en casa y en el salón del consejo.

Solo saltaría y el dolor se iria por fin.

Nadie la extrañaría, nadie se arrepentiría de su propia muerte, solo se alegrarían de su muerte