one-shots y especiales

dust

En lo que era un pasillo largo y muy bien decorado un joven de pelo negro sosteniendo un cuchillo caminaba rumbo al final del pasillo, este estaba solo en su totalidad cosa que le desconcertaba las ultimas 56 veces allí estaba una de las jueces que trataba de convencerlo de parar su genocidio sin parar, pero esta vez no había ninguna.

Es raro – dijo esta alerta para esquivar algún ataque sorpresa – ugg – este dio un salto al esquivar huesos saliendo del suelo – ¿de dónde? – se preguntó mirando a todos lados –

Revisando con su mirada pudo ver a una figura parada al final del pasillo sin tener la vista en el dándole la espalada, esta figura solo levanto la mano y la zona se ilumino de un tomo morado de la nada todo desapareció de ese lugar

Qué demonios – fue lo que dijo el chico al ver como el pasillo ya no existía solo había un hueco enorme donde se veía el suelo del lugar a varios metros de distancia de donde estaba –

Hehehe – se escuchó una voz femenina de fondo reírse – sabes – empezó a hablar a la vez que el chico tenía que esquivar huesos –

Huesos salían de las paredes de forma no letal, solo para que el chico se alejara de donde estaba, esta figura extendió la mano y una estrella dorada se dirigió hacia ella quien la tomo en su mano y ella le puso una cadena alrededor de esta y se la puso como collar

Otros te pedirían que te detuvieses – le dijo mientras no paraba en su ataque – pero al final es una pérdida de tiempo – fue lo que dijo antes de mover un dedo que un hueso atravesara la pierna del chico –

El tiempo parecía detenerse mientras la figura se colocaba una polvorienta bufanda roja en el cuello, y solo se quedaba parada viendo al chico con una mueca de dolor por el hueso que le atravesó ante la indiferencia de la figura frente a él.

Hace un horrendo día afuera – la figura dijo mientras que los huesos rompían los lugares donde salían – las aves mueren, las flores marchitan – la figura salió de la oscuridad donde estaba mostrando una sudadera azul con capucha gris abierta, un pantalón deportivo negro con dos rayas blancas a los costados, unas deportivas blancas y negras junto a una camisa blanca –en días como estos...... niños como tu.... merecen ser torturados por mi mano hasta el final de los días – dijo mientras un brillo azul aparecía de forma intermitente en su ojo derecho hasta perderse –

Al decir eso solo cerro la mano en un puño y todo el lugar fue devorado por huesos que emergían de la nada atravesando al chico y derrumbando por completo la estructura del lugar hasta no dejar nada de la sala donde estaban y al momento de que empezó a desmoronarse le estructura la figura se teletrasnporto fuera de esta solo dejando polvo cayendo al suelo y aparecer frente a lo que era una calle del reino de los humanos y los monstruos.

Apareciendo en frente del chico de pelo negro y ojos rojos vistiendo un suéter verde y pantalones cafés cortos, quien se lanzó a atacar a la encapuchada que solo esquivaba sus ataques con suma facilidad ante todo el esfuerzo del chico quien daba todo del armado con su cuchillo dispuesto a matarle, pero esta solo se burlaba de el al esquivar todo.

De un momento a otro la figura se detuvo y dejo que el chico se acercara a ella para esquivar la apuñalada que iría a su pecho esbozando una sonrisa mostrando todos sus dientes, sacando de las mangas de su sudadera un hueso roto que encajo en el estómago del mencionado quien se alejó rápido de esta, y frente a él se abrió un menú parecido al de un juego con varias opciones pero eso solo saco una sonrisa desquiciada de la encapuchada quien alzo su mano y varios huesos de un color rojo intenso rompieron dos opciones, mercy y objets

Al hacerlo de inmediato los huesos atravesaron al chico matándolo y este volvió a aparecer esta vez en la estrella del lugar a pocos metros de su cuerpo empalado, pero se paralizo al ver como uno de los llamados gaster blaster que la juez usaba apareció detrás de el sin hacer ruido como los otros y disparo un láser blanco de inmediato sin darle oportunidad de sobrevivir, solo dejándolo para usar el punto de guardado que la encapuchada tenía en su cuello como collar.