CASADOS POR 6 MESES ✧ HEEJAKE

11.

La claridad se colaba por la ventana anunciando un nuevo día, el primero en despertar fue Jake, sentía una pesadez muy grande en los ojos y la cabeza le dolía. Todo como consecuencia de haberse dormido mientras lloraba.

Con una de sus manos talló un poco sus ojos y con la otra pretendía hacer lo mismo pero un peso no dejaba moverla. "¿Y si vino Som en la noche y me arrancó la mano?" pensó asustado pero rápidamente desechó esa idea.

Al voltear a ver se llevó la sorpresa de su vida, Heeseung estaba sosteniendo su mano mientras dormía plácidamente. Se talló nuevamente los ojos para comprobar que estaba viendo bien, y en efecto, lo estaba haciendo.

Quiso pararse pero no pudo, aún seguía molesto por lo que le había dicho, la cálida imagen de Heeseung durmiendo no tenía por qué ablandar sus sentimientos, porque en otro punto de su vida y si ellos tuvieran una buena relación podría acostumbrarse a verlo así cada mañana. Ante ese nítido pensamiento se pellizcó su propio brazo para volver a la tierra.

- Lee, hey Lee.

Parecía dormir como una piedra porque no se movía para nada, Jake empezó a mover su mano para sacarla del agarre y al parecer eso sí sintió Heeseung porque jaló su mano hasta su cabeza y la usó como almohada.

- Un poco más Som - otra vez estaba ese tono que solo empleaba con ella.

- Suéltame si no quieres que te arroje fuera de la cama.

Heeseung abrió rápidamente sus ojos al escuchar la voz de Jake tan cerca, y es que estaban viéndose de frente por lo que había hecho el mayor.

- Lo siento - por fin soltó su agarre.

- Date prisa, no quiero llegar tarde a la escuela - Jake dijo parándose rápido de la cama.

- Jake, espera.

- Ayer te dije que no quiero hablar contigo.

Heeseung tenía la esperanza de que su coraje haya disminuido solo un poco aunque sea, pero no lo hizo en absoluto, ya vería qué hacer después para disculparse porque él de verdad no solía decir cosas así de hirientes, él no era así.

El camino a la universidad fue tortuoso, nadie hablaba, la música inundaba el auto pero ellos solamente iban con la mirada fija en la calle.

Jake ni siquiera se había despedido como solía hacerlo y eso muchos alumnos lograron notarlo. El menor no quiso hablar de eso con sus amigos, ellos lo notaban decaído pero no quisieron intentar preguntarle, sabían que cuando se trataba de sus emociones muy difícilmente las sacaba.

Heeseung tampoco estaba muy concentrado en sus clases, parecía estar con la cabeza en otro lugar pero a comparación de Jake, él sí pudo ocultarlo bien.

La culpa guió al pelinegro hasta la puerta del salón de Shim, todos lo miraban extrañados porque él jamás había ido por esos rumbos, pero ahora estaba ahí, esperando por el menor quien al verlo solo se volteó dispuesto a volver a su lugar.

- No sabemos qué tiene - Félix le dijo preocupado a Heeseung.

- Es mi culpa y yo lo arreglaré.

- Él no querrá verte si es tu culpa, pero suerte - Sunoo palmeó su espalda mientras avanzaba con su amigo.

Ahora ambos estaban en el salón del menor completamente solos, Jake veía por una ventana del gran lugar y Heeseung caminó hasta él.

- Jake - lo llamó pero no le hizo caso - Hey Jake te estoy hablando.

- No quiero verte ni escucharte.

- Pero yo quiero que hablemos - caminó hasta él y lo tomó por los hombros - Mírame.