CASADOS POR 6 MESES ✧ HEEJAKE

29.

No, esto no podía estar pasando, seguramente era una muy mala broma de Heeseung ¿Verdad?, no le podía estar llamando error a lo que él creyó que era una de las cosas más lindas que le habían pasado.

- ¿Qué? - Jake le preguntó preocupado. - No puedes decir esto.

- Lo siento por haber tomado tu primera vez pero me equivoqué, no siento nada romántico por ti.

- Heeseung no me digas que no sentiste nada, por dios tú me besabas de una manera tan especial - Lo jalaba del brazo dejando caer las cosas que aún tenía en manos.

- Tengo novia no puedo hacer esto.

- Tuviste sexo conmigo, y... ¿Ahora te importa tu maldita novia?

- Ya Jake - El mayor se puso de pie - Voy a decirle.

- Heeseung - También se levantó y sostuvo con sus manos la cara del contrario - Bonito, me gustas.

- Perdón por no corresponderte, pero no creo que seas capaz de querer a alguien - Incluso a él le dolió decir eso.

- Pues lo hago, y es a ti - Pequeñas lágrimas se deslizaban por sus mejillas.

- No puedo Jake, lo siento.

Con una opresión en el pecho Heeseung alejó las manos del contrario y se fue del lugar mientras dejaba sólo con el corazón roto a Jake quien levantaba el sobre con fotografías que ya no pudo entregarle.

Heeseung había decidido dejar atrás sus dudas y seguir su vida tal cuál, después de todo Jake no sería capaz de tomarlo en serio y tampoco podría tener algo de distancia, él lo dijo.

El menor salió otra vez de su casa, ya no aguantaba estar en el mismo espacio que Lee, se sentía utilizado, sí, utilizado por el mayor para descubrir su orientación sexual, después de todo era un closetero porque había incluso llegado a la cama con un chico pero se seguía negando a lo que verdaderamente era, justificándose con que se había equivocado.

Pensó por largas horas en su estudio donde lloró como niño chiquito que pierde un juguete, así era la intensidad de sus lágrimas, qué había hecho mal, él no lo sabía y ya no buscaría más respuestas, estaba cansando de lo mismo de siempre, era consciente de que su cometido era casi imposible pero jamás creyó que doliera tanto. Consideró pedirle a su papá que los separara pero no daría su brazo a torcer, ya no intentaría nada más con Heeseung pero no quería quedar como niñito tonto que no aguantó nada, claro que no le daría el gusto al maldito de Lee.

Volvió a su casa decidido a enfrentarlo, encontrandolo en la sala con la mirada perdida, se veía afectado como si Jake hubiera sido el estúpido que rompió su corazón y no al contrario.

- Lee, hablemos - Llamó su atención.

- ¿Me vas a pedir el divorcio? - Preguntó sin mirarlo.

- ¿Y dejarle el camino libre a tu novia? Jamás.

- ¿Qué?

- Olvida todo lo que te dije en la mañana, me veía repugnante.

- Jake - Lo miró preocupado.

- Siempre tuviste las cosas fáciles, di todo de mi parte para que lleváramos la fiesta en paz y siempre fuiste una mierda conmigo.

- Lo siento.

- Ya no importa, regresemos a lo de antes Heeseung.

- ¿Qué quieres decir?

- Odiame como cuando me conociste y yo lo haré contigo.

- No puedo hacer eso Jake.

- ¿Por qué?

- Hemos convivido por muchos meses y no puedo odiarte.