𝗘𝗻𝗰𝘂𝗲𝗻𝘁𝗿𝗼 𝗜𝗻𝗲𝘀𝗽𝗲𝗿𝗮𝗱𝗼 " 𝓎𝒾𝓏𝒽𝒶𝓃 ¡!

Capítulo doce: Toques

Hacer el amor es algo más que especial, hay muchas formas de realizarlo, incluso solo con mirarse y hablar entre ambos de manera profunda era uno de los métodos de hacerlo ya qué ambos se desnudaban mostrando sus debilidades y virtudes, para Wang yibo solamente acariciar las mejillas de xiao zhan, bajar por su cuello, clavículas y torso desnudo era más que suficiente, tan solo con verlo retorcerse debido a las caricias qué dejaba en su cuerpo era el mayor placer qué zhan podría otorgarle.

– ¿por qué me miras de esa forma…? – preguntó xiao con timidez. Parece que fuera a devorarme, pensó.

– es que, simplemente… no sé cómo pude contenerme hasta ahora, no se como no me lancé a ti apenas ese día abriste la puerta de tu departamento, creo que podría llegar al clímax con tan solo verte de esta manera, con tan solo tocar la calidez de tus mejillas o el ardor de tu piel ¿Me permites amarte una vez más? – yibo comenzó a dejar un recorrido de besos húmedos desde su cuello descendiendo hasta su pecho, pezones, abdomen y más. – ¿Mh, qué dices? Déjame amarte bien, xiao zhan… –

Xiao se iba a morir, si es que antes estaba caliente justo ahora estaba en llamas vivas como si del infierno mismo se tratara, su corazón latía con fuerza, se sentía como un adolescente enamorado nuevamente y en respuesta zhan cubrió su rostro qué enrojecido hasta las orejas y nuca en un rojo vivo, susurrando. – N-no se que esperas, solo hazlo… no me hagas rogar, no lo haré… –

– No te preocupes… Me aseguraré de verte hacerlo, de todas las formas posibles, tenemos toda la noche y probare cada parte de ti… – zhan no supo en que instante fue volteado y puesto boca abajo contra el colchón, sus ropas inferiores fueron arrancadas de una manera que logro qué todo de él se estremeciera, su espalda se arqueo cuando Wang puso una de sus manos en la espalda baja de xiao teniendo como resultado qué las caderas del mayor se levantarán y su trasero quedara alzada, su mano bajo hasta su ropa interior qué aun zhan traía puesta, qué parecian de hecho más unas bragas femeninas de lo delgadas qué eran. Sean se sentía tan expuesto qué ahogo un chillido en la almohada con una vergüenza que llegaba hasta las nubes.

– ¡Wang yibo! ¡¿Q-Que haces…?! No hagas eso, está sucio… – replicó zhan removiendose.

En respuesta a su inquietud Wang mordisqueo sus glúteos e hizo a un lado su ropa interior para succionar alrededor de su anillo dejando notorias marcas rojizas. – ¿sucio? Por favor, zhan-ge… eres realmente hermoso, en todos lados. –

Y así yibo paseo su lengua por esa rosada entrada qué tanto deseaba saborear, su sinhueso se movió de forma circular hasta comenzar a introducirse lentamente, su interior estaba tan apretado como lo imaginaba, tan caliente y estrecho qué tan solo pensar que su polla estaría en lugar de su lengua lo hacía delirar.

– ¡nhg! ¡ugh! Y-yibo…, no, mh… se siente, se siente extraño… Me siento extraño… – Wang yibo ya no escuchaba, sus dos brazos envolvieron ambas piernas y su rostro se hundió entre sus glúteos, devorando su entrada con deseo y fuerza, el grito qué xiao lanzó fue tan grande que estaba seguro que se había escuchado en todo el bosque, zhan sin darse cuenta había comenzado a mover sus caderas en un vaivén constante mientras sus manos apretaban fuertemente las sábanas al punto que sus nudillo se volvían de color blanco. La mano derecha de yibo se deslizó hasta el miembro de zhan qué goteaba liquido pre-seminal comenzando a mover su mano en su falo al ritmo mismo en el que embestía su interior con su lengua. Xiao zhan se retorcía y deshacía en gemidos agudos qué eran ahogados por la almohada la cual el mismo mordía y babeaba, el cuerpo de zhan se estremecía cuando un golpe de corriente lo golpeó duramente y entonces…