" Tu corazón se acelera y agita al recordar tu primer amor, ya sea inolvidable o no, siempre volverá a ti"
Una frase que era difícil de creer para Xiao zhan que después de casarse con la bella actriz yang zi luego de haberse " enamorado " en la ser...
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— Hola, esposo —
Xiao zhan la verdad no creyó verla hasta dentro de una semana que sería ya frente a juez, Esperaba que sus ojos lo estuvieran traicionando así que pestañeo fuerte por unos segundos hasta enfocar una vez más su vista y darse cuenta que por lastima, lo que veía era cierto, su ex esposa estaba frente a él como si nunca hubiera hecho nada, como si jamás hubiera arruinado su carrera y su vida privada y como si jamás lo hubiera dañado. A pesar del enojo que sentía desde dentro de su ser, no quería tomar una decisión apresurada y arruinar más las cosas para que estén a su favor. En los pequeños segundos que todo estuvo en un segundo sepulcral, ideó una estratégia en su mente, terminando por sonreír metiendo sus manos a los bolsillos, acercándose a la joven.
Yibo detuvo su paso, tomando el brazo de Zhan, se veía desconfiado pero no de él, de ella en especial. Xuan lu fue la primera en hablar, poniéndose frente a xiao zhan, cruzada de brazos.
— ¿Se puede saber, qué haces tú aquí? Se supone que este era un lugar privado, solo nosotros lo sabíamos. — su tono de voz fue golpeado, con intenciones de herir a la mujer frente a ella.
— ¡ay, cosita linda! Olvidas que tengo ojos y oídos por todas partes, gracias a la querida madre del pervertido que me quitó a mi amado esposo… ella es la única que entiende mi dolor, es la única que entiende cómo se siente mi corazón y, xiao zhan, xiao zhan… — Yang zi pronunció su nombre repetidas veces, llevando una de sus manos a su propio pecho, con una expresión dolida en su rostro. — creí que me amabas lo suficiente… pensé, por un momento pensé que serías tú quién me sacara de este dolor, pensé que serías el hombre indicado para mi, ¿Acaso nunca sentiste nada por mí…? Se que he errado, se que me he esquivado pero nunca, jamás te he querido dañar a propósito… — La expresión de asco en el rostro de Yibo era fácil de notar, incluso Yubin dejó escapar una pequeña risa, todos estaban expectante y hai-kuan tuvo que retener a a-xian porque el menor quería quitarle los cabellos a tirones.
Yang zi entró al departamento y cerró la puerta detrás de ella, todos la veían expectante pero ella solo veía a xiao zhan, esta vez lágrimas cayeron por sus mejillas y se acercó lo suficiente a zhan, evitando a xuan lu qué tuvo que detenerse a golpearla. La mujer que sollozaba posó sus manos en el pecho de quien según había amado desde que lo vio, lo acarició y sonrió a la vez que zhan veía caer esas lágrimas qué él sabía, qué no eran reales.
— Si… Yo te expuse, puse todos tus documentos de tus propiedades a mi nombre y me encargue que jamás te dieras cuenta de eso, estafe a muchos hombres antes de conocerte, conocí a muchos hombres, cada uno me acariciaba como si fuera lo más hermoso que habían visto, algunos me prometían cielo, mar y tierra para que fuera feliz pero… ninguno me satisfacía, ni siquiera el diamante más hermoso que pude llevarme de ellos… Nada, nada llenaba ese vacío. Hasta que te conocí… ¿Recuerdas? Íbamos a crear el drama juntos, y presentaron a todos del elenco hasta que te nombraron y pasaste frente a mis ojos y, jamás antes vi algo tan hermoso, más hermoso y valioso que un diamante y supe que debías ser mio, tenias que ser para mi y para nadie más, sabía cuanto te habían lastimado y como estabas sufriendo, solo y sin tener en quien confiar… —
