Siempre me había preguntado por qué nunca me enteraba de retos de escritura, y casi lloro cuando descubrí Es de Fanfics y que ellos llevan a cabo el Kinktober y el flufftober 🤧
En fin. Sé que Choki no escribe hace siglos... pero creo que esto es un...
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—Bueno, luego de tales eliminatorias... ¿Qué tal relajarnos con un día de campo?— sugirió Ichiro mirando a ambos menores mientras estos ya descansaban en el sofá principal de la residencia Yamada.
Ninguno tuvo objeción, querían pasar tiempo con su hermano. Aunque para sorpresa de Jiro, Saburo no se puso a pelear sobre lo que harían ambos en el día de campo.
—¿Podemos invitar a alguien?
—¿Qué? Oh~... Saburo quiere invitar a su noviecita~...
—¡Cállate, Jiro! ¡Ella no es mi novia!— dijo jalándole la oreja. Jiro trató de responder, pero fue inútil. Ichiro no pudo evitar reír ante la situación e intervino.
—¿Quieres invitar a ______?
—Bueno... siempre estamos jugando en línea. Nos haría bien... salir a tomar aire fresco...— ese ligero sonrojo en las mejillas del menor claro le daban una señal. Rio y asintió.
Más tardó Ichiro en responder, que en lo que Saburo salió corriendo de casa.
Por supuesto era más rápido mandar un mensaje, pero aprovecharía esta oportunidad para verla.
Tocó de manera desesperada la puerta, y para su suerte, no le abrió su madre. Seguro le hubiera dado una platica cuestionando su orden mental y que no le gustaría que ella fuese a hacer eso a su casa.
—¿Qué a caso estás loco? ¿Te gustaría que yo fuera a tirar tu puerta a golpes?— dijo ella tratando de imitar a su madre y rio despeinado su cabello —Hola, pequeño Saburo.
—Ya te dije que no me digas así.
—Pero si eres pequeño. Además, eres adorable— pellizcó su mejilla y el apartó su mano. —¿En qué te puedo ayudar?
—Ichiro nos llevará de día de campo. Él... quiere saber si te gustaría ir con nosotros.
—¿Día de campo con los Yamada? ¡Yei! Eso suena muy divertido. Acepto, pero-...
Y dejándola con la palabra en la boca, volvió a correr, esta vez de regreso a su casa. Le informó a Ichiro su respuesta y comenzó a planear que actividades podrían hacer.
No faltó aquel mensaje de la invitada pidiendo detalles, entonces se dio cuenta muy tarde de que lo había olvidado.
—Te ves emocionada, ______. Espero te diviertas con nosotros.
—Saburo dice que eres un gran hermano, así que creo que seguro me divertiré. Gracias por invitarme, Ichiro.— él rio.
—Agradécele a Saburo que insistió.
—¡I-ichi-nii!— se quejó el menor tratando de ocultar aquel peculiar sonrojo en sus mejillas. Ella solo soltó una risa. No quería ponerlo en aprietos recién iniciado el picnic.
Ichiro fue el encargado de poner la manta en el pasto mientras los tres menores terminaban de bajar las cosas del auto. Jiro ni bien esperó a que todo estuviera listo para gritar.
—¡Juguemos futbol!
—Bien. Vamos chicos.— dijo Ichiro acercándose a Jiro.
—Agh, no. Yo tengo planeadas actividades mucho mas-... ¡______!— ella lo miró.
—Yo si quiero Jugar.— se excusó.
—¡Ja!— se burló Jiro en dirección a Saburo —Nii-chan, ______ y tú pueden hacer equipo. Yo puedo cumplir la función de dos— dijo pateando la pelota siendo al instante interceptado por Ichiro que logró quitársela.
Era increíble. La cita de Saburo se había arruinado.
Indignado, el menor se apartó de ellos, quienes parecían divertirse en grande. Se sentó junto a un arbusto de lindas flores lilas y simplemente comenzó a arrancarlas, repitiendo que el amor era una porquería y cosas así.
Notó como había un par que estaba entrelazado, dándole la idea de que, quizá, aun podía hacer algo para que ella lo prefiriera.
Tomó todas las flores que había arrancado y empezó a tejer una con otra. Se veían lindas y expedían un dulce aroma debido al constante manejo de estas.
—¡Saburo! Ven, es hora de comer— gritó Ichiro algo cansado debido al juego. Saburo suspiró acercándose y se sentó con ellos, ocultando claro su pequeño regalo.
—Saburo— comenzó ella —Ichiro dijo que luego de comer, podemos hacer lo que tú quieras. Siempre tienes las ideas más divertidas y tranquilas que nos ayudarán a digerir la comida. ¿Qué planeaste, huh?
Saburo mordió su emparedado sin mirarla. Ichiro rio para sus adentros siguiendo con su comida. Ella claro no dejaría que ese chiquillo hiciera berrinche.
—Jiro— o quizá si —¿Quieres la revancha luego de comer?
—Desde luego. Los haré perder de nuevo, y-...
Las acciones de Saburo lo interrumpieron. De manera rápida y algo brusca, colocó aquella corona tejida de flores sobre la cabeza de ella dejándola un poco chueca.
—No, Jiro— dijo con fastidio —No vamos a jugar esa estupidez del futbol. Vamos a hacer un maratón de UNO y créeme que estoy ansioso por aplastarte, maldito idiota— dijo entre dientes. Sin duda estaba molesto, pero al instante, todo odio desapareció al sentir aquella suave presión sobre su mejilla. Sus mejillas capturaron un gran color rojo y continuó comiendo rápido ocultándose en su capucha.
—Te quedó muy linda, Saburo. Gracias.
—Aww, Saburo le dio un regalo a su novia~...
—¡Jiro!— gritó decidido a golpearlo, de no ser por que Jiro fue mas rápido. Se persiguieron por un rato alrededor del lugar mientras Ichiro y la chica reían divertidos por la escena.
No le molestaba. De hecho, pensaba hablar seriamente con Saburo respecto al tema.
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Si mi Sabubu no hace berrinche en el capitulo, no es un buen capitulo.
Ustedes saben lo fan que soy de Saburo Masita, así que, aqui anda jsjsjs
