Siempre me había preguntado por qué nunca me enteraba de retos de escritura, y casi lloro cuando descubrí Es de Fanfics y que ellos llevan a cabo el Kinktober y el flufftober 🤧
En fin. Sé que Choki no escribe hace siglos... pero creo que esto es un...
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—¿Cenamos mañana?— dijo contra mi oído mientras caminábamos abrazados hacia mi casa. Me generó un gran escalofrío... lo miré asintiendo.
—¿Cuando descansas?— él sonrió. Por alguna razón, sabía que se debía a mi nerviosismo.
—Hum... ¿Qué tienes planeado para mi descanso?
—Sólo... no sé— seguí caminando —Abrieron en el centro comercial una pista... quería invitarte a patinar... quizá sea una tontería o lo encuentres aburrido, pero podemos ir a la galería, o...— me tomó entre sus brazos de nuevo acariciando mi cintura.
—Patinar... suena bien. Será divertido. ¿Pero por qué tanta duda?— me encogí en hombros.
—¿Entonces es una cita?— rio asintiendo.
En realidad... creo que nunca lo había invitado a salir.
Él siempre es el de "¿Vamos a tal? ... "¿Quieres ir a...?" ... "Abrieron esto" ... "Quiero llevarte a" ... una infinidad de invitaciones y más. ¿Y yo qué?
Nunca lo había invitado a ningún lado. Si él no se despide de mi, yo no lo haré... dios, soy tan extraña. ¿Por qué no me ha dejado?
Mi teléfono sonó mostrándome su nombre Jyuto ¿¡Por qué ni siquiera lo tengo agregado con algo más lindo?
—¿Hola?
—¿Solo hola?— se burló. Mordi mi labio sentándome en la cama.
—Hola... hum...
—Te escucho~...
—Hola mi amor...— dije casi en un susurro. Claro rio.
—¿Cuándo dejará de darte pena?
—Es... raro. ¿Vas a terminar conmigo?
—¿Qué dices? Claro que no— soltó una risa —Me gusta como eres. Tan... tierna~...— soltó esa maldita risa que tanto me encantaba.
—¿Ya ibas a dormir?
—Creo que no... ¿querías algo?— sabia lo que quería... quería comenzar yo pero... las palabras no salían...
—Escucharte. Sabes que me encanta~...— sonreí mordiendo mi labio.
—Estoy lista...— murmuré.
¡DEFINITIVAMENTE TENIA QUE HACER ALGO AL RESPECTO!
• • •
—Que linda te ves~...— comentó cuando abrí la puerta. Se iba a acercar pero decidí tomar la iniciativa y abrazar su cuello besandolo. Él tomó mi cintura presionandome contra él. Demandó un poco más de mis labios recargandonos en la pared —¿Y esto~...? ¿A qué se debe~...?— dijo soltando una risa acariciando mi mejilla.
