Siempre me había preguntado por qué nunca me enteraba de retos de escritura, y casi lloro cuando descubrí Es de Fanfics y que ellos llevan a cabo el Kinktober y el flufftober 🤧
En fin. Sé que Choki no escribe hace siglos... pero creo que esto es un...
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"Oye guapa..." "Decidí tomarme el resto de la tarde libre." "¿Puedo pasar por su majestad?"
VISTO☑️☑️
Ese par de palomitas sin duda lo molestaban... ¿Por qué merecía él un par de palomitas azules?
"Quieres ser arrestada a caso?" "Nena~..." "Por favor, contesta~..." "¿Estas ahí?"
VISTO☑️☑️
Algo sin duda estaba mal con su chica, así que sin dudarlo, condujo hacia su trabajo. Esperó afuera con paciencia, pues aún faltaba tiempo para su salida y, a veces incluso, salía un poco tarde. Según ella, no había terminado sus pendientes y no podría dormir.
Pensó por un momento ir en busca de un rico postre para ella y así subir aunque sea un poco su ánimo, independientemente de lo que hubiera pasado. Estaba por arrancar cuando la vio salir.
La cosa se puso aún más rara cuando no se despidió del guardia. Según le había contado, eran buenos amigos y en distintas ocasiones en que la recogió, veía como bromeaban.
Cruzó la calle y estaba por seguir por aquella calle donde tomaba el autobús, de no ser porque Jyuto tocó el claxon. No pudo evitar soltar una risa cuando ella dio un salto por el susto.
Ella sin dudar, golpeó el auto, obligándolo a borrar esa risita y a salir del auto.
—¿Quieres ser arrestada a caso?— lo ignoró por completo siguiendo su camino.
Eso era el colmo.
Fue tras de ella y la cargó cual saco de papas llevándola a su respectivo lugar en el auto. La aseguró con el cinturón y le quitó los zapatos para que evitara huir. Ya por ultimo tomó sus manos para que no siguiera empujándolo.
—Hola sexy sargento, gracias por venir por mi. Le espera una gran noche de sexo.— dijo besándola a la fuerza. Cerró la puerta poniendo seguro y volvió a su lugar. Ella, muy inteligentemente, se estiró a poner el seguro y una sonrisa se le escapó.
Por lo menos ya había sonreído.
Tomó las llaves y abrió subiendo al auto y encendiéndolo.
—Alguien viene de mal humor~...— canturreó avanzando. Aún faltaba rato para llegar a casa —¿Qué sucedió? ¿Vas a contarme o permanecerás callada toda la noche?
Ella, molesta claro, se giró recostándose contra la ventana, dándole la espalda. Jyuto rio sacando un cigarrillo para fumar. Estiró su mano y la dejó sobre su pierna acariciando suavemente. Ella lo miró mal aventando su mano de manera brusca.
—Solo trataba de hacerte sentir mejor— dijo haciéndose el ofendido —Nena, hablo en serio. ¿Qué sucedió? ¿Cuál es el punto de esto— señaló a ambos —si no me cuentas lo que te molesta?— dijo mientras la miraba de reojo, manteniendo la mayor parte de su atención en el camino.
—Otra queja...— murmuró.
—Otra queja, ya veo... ¿esta vez de qué fue?
—¡Lo mismo de siempre!— se quejó —Esas chicas... ¡ah! Si tan solo las vieras. Podrán ser lindas físicamente, pero no tienen tacto ni un poco de empatía por mis clientes. Les avientan las cosas, los ignoran por ver su teléfono, le gritaron a una señora hoy, y como líder del área, claro que les llamé la atención. La maldita se puso a gritarme y cuando hice su trabajo por ayudar a la señora, la estúpida se enoja y casi nos peleamos.
—¿Casi?— preguntó con cierta burla —¿Por qué no?
—Apareció mi jefe— suspiró haciéndose pequeña en su lugar —Claro el regaño me lo llevé yo por ser "el ejemplo" de mi equipo.— soltó un quejido.
—¿Sabes? Nunca te había escuchado decirle tantos insultos seguidos a una persona— rio, ganándose una mala mirada de su parte —Vamos, solo quiero que te rías...— aclaró su garganta —¿Y qué te dijo el jefe?
—Me sancionó. Me hizo pedirle una disculpa a esa...— se quejó. No quería usar las palabras que ya había dicho.
—¿Perra?
—¡A esa maldita perra!— gritó molesta.
—¿Y lo hiciste? ¿Por eso estás así?
—¡Por supuesto que no!— sus lágrimas comenzaron a caer —Yo... cuando se supone que me iba a disculpar, le solté todos mis argumentos del porqué era una inútil. Ahora, estoy sin trabajo porque se me ocurrió decir que el jefe se... divierte con esas y por eso la mala soy yo... dios, me siento como adolescente a la que suspenden por llevar cigarrillos a la escuela...
—Solo que a ti no te suspendieron, te expulsaron— rio deteniéndose en un semáforo, claro no ayudaba —Linda, escúchame— se giró a ella tomando sus mano, luego de limpiar delicadamente sus mejillas y los rastros de lágrimas que aquí habían —Eres maravillosa.
—Jyuto, por favor, no empieces...— ella iba a soltarlo, pero claro él no lo permitió.
—Eres la mujer mas profesional, inteligente, sexy y dedicada que he conocido en toda mi vida. ¿Una vieja cualquiera que entra abriéndole las patas a su jefe puede contra ti? ¡Por supuesto que no!— se acercó a besarla —Eres increíble. A donde sea que vayas, tú vas a conseguir trabajo, ella... bueno, en tanto todos se dejen engatusar— rio —Nadie puede contra ti, preciosa. Eres la mejor de las mejores. Mañana, te acompañaré a buscar trabajo, así que has una lista de nuestro recorrido. Desayunaremos fuera, vamos a-...— un claxon lo interrumpió haciéndolo soltar una mueca.
—Solo vámonos a casa— dijo riendo levemente. El claxon sonó de nueva cuenta.
—¿Quieres ser arrestado?— gritó asomándose por la ventana. Ella, riendo, lo jaló del sacó haciéndolo entrar y se acercó a besarlo con intensidad.
—Andando, Sargento~...— susurró acariciando su pierna. Él la miró con una sonrisa coqueta.
—¿Te sientes mejor?— asintió.
—Amo que siempre me hagas sentir mejor...— tomó su mano —y sobre todo, que me apoyes tanto— él besó el dorso de su mano.
—Siempre voy a-...— el claxon de nuevo la hizo reír y solo pudo besarlo para avanzar y llegar pronto a casa. Sin duda recompensaría su apoyo de hoy.
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ES QUE MI SARGENTOOOOOOOOOOO
No puedo escribir sin evitar meter un poco de su personalidad jariosa(? 😫
Yo sé que están ansiosos por leer algo del kink de Jyuto... pero descuiden, ya se acerca, solo tengan paciencia.
