La Primera Vez Que Te Vi

Capítulo 25.

Capítulo 25.

Michael Winston.

-Ya te dije, cero fiestas, cero amigos, cero peleas, no quiero quejas de ningún vecino ¿me estás escuchando no es así Michael? - mi abuela tenía las llaves en sus manos, con cierta duda en entregarmelas.

-Si, si, lo sea abuela, ya entendí - dije intentando quitarle las llaves, pero esta las aparta.

-Pues eso espero, ya estas bastante grandecito para estarme dando dolores de cabeza.

-Si abuela, lo se. Ya soy casi un adulto, puedes confiar en mi sin ningún problema.

-Eso dijiste la última vez y por poco nos quedamos sin casa - me recalca levantando una ceja.

-Eso fue hace tres años abuela, prometo que no volverá a suceder - le suplico.

Ella suspira. - Bien, aquí tienes.

Hasta que después de media hora, por fin tengo las llaves en mis manos.

-Espero que cuando llegue escontrar tod justo como lo estoy viendo ahora.

-Claro que si, abue - dije guiñandole un ojo.

Mi abuela se iría por unos días a la casa de su amiga de muchos años, Canela. Hace tiempo que no la veía debido a la distancia que se encontraba entre Texas y New York. Sería mi segunda oportunidad para demostrarle a mi abuela que ya soy un hombre y puedo cuidarme yo solo.

*Eso dijiste la última vez y por poco tu casa se incendia*

Cállate Mars.

-Bien, ya me voy - dice abriendo la puerta -, confío en ti, Michael.

-Si abuelita, Doki y yo cuidaremos bien de aquí.

-Bien, - sonríe - nos vemos en unos días.

-Adiós abuelita - me acerco a ella para darle un abrazo.

-¿No me extrañarás, verdad?

-Nah, ya estoy bastante grande, estaré bien solo, no te preocupes - le guiño el ojo.

-Bien, nos vemos después entonces - con estas palabras termina de irse.

Ahora estoy solo.

Solo...

Oh, oh.

-¡ABUELITAAAAAAAAA!

*En serio eres tan imbécil*

(***)

Allie Jacksonville.

-¡Felices cinco meses, Dustin! - dije a este mientras lo abrazaba con mucha fuerza.

Ya habían pasado cinco meses desde que estábamos juntos, el tiempo vuela y nisiquiera nos damos cuenta. Me sentía tan feliz y no podría creer que había durado tanto con mi primer novio. Este me correspondió el abrazo con una sonrisa.

-Felices cinco meses, Allie.

-Nunca pensé que llegaríamos ha tanto - dije con mucha emoción.

-Nisiquiera yo - afirmó con una sonrisa - ¿quieres ir a mi casa? Quiero darte una sorpresa

-Seguro.

El camino no era tan largo en donde estabamos. Este me toma de la mano y juntos caminamos por la carretera. Estaba todo muy silencioso, pero me decidí por seguir un camino tranquilo y solo disfrutarlo. Al llegar, todo se encontraba igual de silencioso, era un silencio tan profundo, difícil de explicar. Entrando el silencio se hizo mucho más profundo, deje salir un largo suspiro, era tanto el silencio que mis suspiros hacían ecos por toda la casa.